Un local ubicado en un edificio entero en el que algunos bajos están realquilados a otros locales y que en la planta alta se dispone toda la cocina que aún utiliza carbón como combustible y que pudimos visitar después de comer por relación personal con el dueño. En la planta primera y segunda con una distribución en salas grandes pues se trata de una vivienda completa que proviene de 1768 como posada de ánimas. Dispone de un par de horas de aparcamiento gratuito cercano que se hace imprescindible en la zona en los fines de semana.
El mobiliario y decoración es de tipo castellano antiguo, con sillas y mesas cómodas grandes y bien vestidas, buenas copas vajilla y cubiertos. El servicio de corte clásico y académico con un punto cercano y comprensivo con la presencia de niños aunque al estar aislados en una sala permitió mayor comodidad y menos molestias a los vecinos.
La carta de vinos es más bien corta y más clásica que el edificio con algunas medias botellas. Tomamos Pago Valdoneje 2021 godello (18,50€) y Tagonius crianza 2018 (21,50€) como único representante de Madrid que estuvieron bien; también 5 de agua.
La carta de comidas incluye el llamado menú del día Posada (19,25€) fuera de los fines de semana y festivos; menú castellano (31€); cocido completo (24,50€) para los jueves y la carta propiamente dicha distribuida en los clásicos entrantes ensaladas primeros y segundos con carnes y pescados además de los postres con bastantes opciones en todos los grupos de platos; la cocina es castellana en sus esencias y productos con emplatados básicos.
Reunión familiar con 9 adultos y 5 niños de variadas edades (pongamos 12 en promedio) y que los adultos tomamos unos entrantes al centro y un principal que, en el caso de cochinillo y cordero requieren encargo previo; por otro lado los peques tomaron algunos un plato principal y otros un poco de todo. Previamente un pan tipo fresado con unos choricitos y ensaladilla de aperitivo por cortesía de la casa.
En total tomamos: sopa de boda, caldo de cocido, sopa de fideos, 2 de croquetas, revuelto de morcilla, níscalos a la plancha, boletus a la plancha, tortilla de jamón, 2 de callos, 2 paletillas de cordero, 2 de cochinillo, 3 chuletas de cordero, 4 medios solomillos de ternera, 3 de tarta 4 leche frita y 2 de natillas caseras más 2 de helados. Buena calidad de producto y destacaría el cochinillo los callos y las setas como más recomendables.
El costo total 512.07€ y nos invitaron a cafés y alguna cerveza de entrada por relación personal.
Visité el restaurante con un grupo que incluía adultos y niños. El resultado fue bueno en líneas generales, pero con algún punto mejorable.
La Sopa Castellana estaba pasada de pimentón y grasa.
La Sopa de boda (de caldo de cocido con menudillos y pan) resulto agradable.
Sacaron tres solomillos de buen tamaño y calidad, en plato refractario. La guarnición de patatas panadera y pimiento al horno, un poco pobre.
El cordero al horno estaba muy tierno y jugoso, aunque de sabor excesivamente fuerte a "oveja"
El cochinillo lo mejor de la comida.
Muy bien el servicio del vino.
Los precios un poco elevados, pero similares a los de otros establecimientos de la misma ciudad.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.