Con el título que he puesto...a ver como salgo de esta y que explico ahora. Quiero referirme a dos cosas, típico lugar con algo de clase para comer carne y aunque cenamos en salones privados que podeis ver en la web del restaurante, abajo, en la zona abierta había un ambientazo tremendo, cenando con música tipo pub moderno, apetecía escaparse del grupo y quedarse abajo. Buen servicio, yo diría muy bueno, superatentos. Elegantes salones, comida bien presentada, entrantes flojos sobre todo en la presentación como en casi todos los sitios por aqui. Carne muy buena y una trata de queso y yogur de postre que estaba para comerse tres raciones. Antes de empezar bebimnos cervezas típicas de Chicago (Goosel varias a mi me gusto la Matilda que es tipo Abadia). Vinos estandares de Sonoma tanto blancos como tintos pero muy agradables. Buena bodega que no catamos al ir con un menú ya cerrado. No se precios, no vi la carta pero a juzgar por el llenazo un jueves abajo tampoco puede ser muy caro. Muy cerca, paseando hay un "garito" llamado Blues Chicago de música en directo muy pequeño pero muy muy autentico