Cuando las salsas son un arte

Se localiza en el hotel del mismo nombre en la región de Cognac. Decoración muy clásica , con mesas amplias, muy buena separación entre ellas. Vajilla, mantelería, cristalería y cubertería de primer nivel. Iluminación indirecta con predominio de las velas, creando una atmósfera intima y cálida.
Carta eminentemente francesa clásica.
Tomamos como primer plato :
Foie gras con teja de almendra y chocolate y gelatina de Pineau de Charentes. Textura cremosa con sabor medio y buena combinación de sabores con los acompañantes. Esa mezcla agridulce con la grasa del higado es original y muy atractiva. Se acompaña de pan briochado recién horneado.
Raviolis de langosta y foie gras con setas y una crema de crustáceos. Plato impresionante. De los enormes, de los que no se olvidan . Ravioli de pasta fresca al dente relleno de foie y de langosta sumergido en una sopa cremosa blanca . Cinco texturas diferentes . Cada bocado era puro placer, la sopa cremosa fluidificaba en la boca con un gusto potente de setas la combinación de las texturas y de los sabores de la pasta , el foie y la langosta. cada sabor iba por su lado y al final se unian como en un paquete con lazo alrededor de la salsa. Plato de los que dan caracter a una cocina.

De segundos :
Langostinos crujientes con spaguetis y nougantine de naranja. Sabor intenso del langostino , con un punto crujiente perfecto combinado con una especie de turron ligeramente citrico. Otra vez las texturas y los sabores se difuminan , para luego compenetrarse y estallar en el paladar. Tecnica maxima con sabor intenso

Langosta decorticada con trufa negra , patatas cristalina sobre caldo cremoso del crustáceo y sabor iodado. El titulo creo que lo dice todo. Sabor a mar intenso, profundo , potenciado con la trufa y el fondo salino. Otra vez las texturas entran en juego al colocar patatas muy finas cristalinas que no se reblandecían con el caldo cremoso. Hay nata suave, hay pimienta, hay iodo, hay sal marina y hay un fondo de la trufa que aparece por detras de la langosta.

Plato de quesos artesanos con seis variedades diferentes.: Comte, Tourraine, Pont L ´Eveque, Robuchon , Saint Nectaire y Brie de Meaux

Postre : Bizcocho de chocolate negro con chocolate liquido y crema de pistachos. Eso, chocolate , chocolate y mas chocolate en un bizcocho esponjoso, suave y tierno con un fondo grandioso de mantequilla y leche condensada.
Muy buenos panes y mantequilla salada o semisalada de muy buena calidad

Carta de vinos muy amplia , prácticamente en su totalidad de vinos franceses a precios muy elevados. Perfecto el servicio del vino.
Servicio de sala extremadamente profesional. Rapido, agil, simpatico y amable.

Las ultimas visitas a Francia no habían sido buenas en lo referente a la cocina. Esta vez la cosa ha cambiado. La sensación en esas ultimas ocasiones era que la evolución francesa (muy posiblemente a rueda de la cocina española) no iba en buen sentido. No eran ellos. Las raíces eran ficticias y eso se notaba al final. Los platos estaban deslavazados y aunque no se podía negar la técnica , al plato le faltaba hilo conductor. Esta vez no. Esta vez me recordaba las primeras visitas a Francia hace mas de 25 años donde descubrí otro mundo gastronómico. este restaurante mima y cuida la raíz de la tradición gastronómica francesa y la explota al máximo. Fue esta una cena de las que no se olvidan con facilidad. La materia prima era excelsa , pero el dominio absoluto del cocinero sobre ellas fue apabullante.
Una vez más me quedo demostrado que la cocina es un arte y los cocineros unos artistas.......
El precio es sin vinos y es aproximado ya que estaba incluido en la media pension