Me decidí a probar este Japonés que me quedaba relativamente cerca, ubicado en un pequeño callejón cerca de la plaza Bonanova.
La carta es principalmente de niguiris, makis y sashimi.
Me decidí a probar el uramaki mosquito, con tempura de langostinos, philadelphia y aguacate, muy buena y sabrosa combinación. Probé también el hosomaki de aguacate, un clásico pero muy bien ejecutado. A continuación los niguiris de pez mantequilla con un pequeño toque de soplete que aportaba un toque muy sabroso al plato. Finalmente probé la tarta de chocolate con atzuki, con ligeros toques salados que en contraste con el chocolate aportaban mucha personalidad a este plato.
Acompañé la cena con un Chardonnay convencional.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.