A saco

Taberna andaluza, a tope, como todas las de la zona, dentro, mesas algo apiñadas, con el servicio algo sobrepasado.

Pedimos:
Un salmorejo, muy suave, poco sabor.
Un rabo de toro, algunos trozos algo duros, de los peores que he comido
Una ensaladilla, simplemente correcta.
No pedimos vino, así que no lo podré valorar.

Mal servicio, en está taberna, me encontré la camarera mas antipática que he visto nunca y no solo con nosotros.

Seguramente hay mejores opciones en la zona.