La situación de este restaurannte, en pleno centro financiero y empresarial de Madrid le hace tener un valor añadido frente a otros sitios de similar nivel.
En días de diario si acudes un poco tarde a la hora de comer y no has reservado lo más fácil es que no encuentres mesa.

El sitio está decorado a modo de taberna andaluza y como indica su nombre los productos estrella son los derivados de los embutidos y chacinas ibéricas, donde se muestran a modo de imagen corporativa una gran cantidad de jamones y lomos casi por todas las paredes del local.

En esta ocasión hemos ido a comer dos personas y paso a detallar las viandas:

Ración de lomo 5 Jotas.Cantidad normal y buen producto.

4 Carabineros de tamaño medio y muy bien ejecutados en plancha.Jugosos y hechos en su punto.

Hemos continuado con dos raciones de carrilleras de ibérico con patatas de guarnición.Tres trozos de carrillera por ración cocinada de una manera tradicional pero bien resueltas,con la carne melosa y en buen punto.

Para terminar dos cafés con invitación a chupitos de orujo blanco por parte de la casa.

Como vino hemos tomado un vino de Ribera del Duero (Viña Castrillo) de crianza(2009) muy afrutado que quitando el apartado de los carabineros ha "armonizado" bastante bien.

La cubertería, vajilla y copas son muy discretas.Creo que a un nível inferior de lo ofrecido por otros restaurantes a tenor de la cuenta final.

En resumen, un sitio al que he ido a comer varias veces y si bien tiene un nivel aceptable tampoco está desde mi punto de vista en mis sitios de referenecia en Madrid.O como dicen los críticos no figuraría entre los locales "must"

Factura de 112€ dos personas