Interesante tapeo en Valencia

Hacía tiempo que me habían hablado muy bien de este local, pero el concepto, una taberna-bar-restaurante-charcutería no me acababa de convencer. Pero había que probarlo algún día y la verdad es que fue una grata sorpresa.
Nada más entrar al amplio local encuentras una larga barra a mano derecha y a izquierda un mostrador refrigerado con productos de charcutería, jamones colgados y algunas conservas. Puedes comprar directamente como en una charcutería ordinaria o puedes comer los productos en el propio local. El local es muy amplio, aunque su máximo atractivo es la terraza exterior en la que han hecho un cerramiento que, imagino, les permitirá disfrutarla también en invierno. Mesas algo juntas pero no excesivamente molesta la distancia entre mesa y mesa, lo que permite cenar con algo de intimidad, aunque este local está más pensado para una cena de grupo.
Cocina sencilla con una carta bastante larga donde se mezclan los productos de la citada charcutería y con algunos algo más elaborados. Tomamos un lacón bastante bueno, aunque el corte demasiado fino, lo que hace que no disfrutes del producto ya que, pese a ser de buena calidad, parece jamón cocido. De todos modos es una práctica que en Valencia está bastante extendida... Alguien tendrá que venir a explicarnos cómo se come el lacón.
Ensaladilla rusa, una de las tapas que más me gusta y aquí la tomamos muy buena, suave, sin cebolla (a mí me gusta más con, pero bueno), muy rica y una buena ración.
Tronco de atún con tomate. El tomate muy bueno pero el tronco algo seco, claro que no era ventresca, pero aún así me resultó algo costoso de comer, teniendo que tirar mano de un chorrito extra de aceite de oliva. El atún era de conserva por lo que no creo que sea un caso puntual, sino de la calidad de la misma.
Tienen una selección de croquetas bastante interesantes, probamos las de cabrales que no me dijeron nada y estaban bastante insípidas, las de ibéricos, que estaban riquísimas, cosa lógica, pues imagino que en este local con los recortes de jamón de buena calidad que tienen se pueden hacer una croquetas de escándalo, como las que probamos, y por último una de bacalao, sólo correcta.
Sartén de huevos rotos con chistorra y pimientos del padrón. Bastante buena aunque con la yema demasiado cuajada, cosa que en verano casi que agradezco e imagino que será a conciencia, por lo que no tomo como algo negativo.
Acabamos con una tarta de queso casera muy rica, que ya se agradece que algo tan sencillo lo tengas que comer siempre "de polvos".
La carta vinos es bastante completa, bien seleccionada y con algunos precios interesantes, por ejemplo, pedimos Martin Códax a 15€, un precio aceptable. Las copas son mejorables y el servicio del vino se limita a poner la primera copa y listo, lo que contrasta con la cuidad bodega acristalada que tienen o referencias como Dom Perignon en la carta, aunque estas cosas cada vez las veo más, supongo que "visten".
El precio está muy ajustado, por lo que se entiende la gran afluencia de clientes que tiene este local. Un lugar interesante al que sin duda volveremos.