ESTE NO ES UN COMENTARIO SOBRE EL RESTAURANTE, SI NO SOBRE SU BARRA.

ESTE NO ES UN COMENTARIO SOBRE EL RESTAURANTE, SI NO SOBRE SU BARRA.

Llegamos por casualidad a este coqueto restaurante y no teníamos reserva, así que optamos por tapear en la barra.

El resultado interesante: compartimos corazones de alcachofa rellenos de erizos, milhojas de salmón con mantequilla de anchoas, foie caramelizado, delicia de bacalao, un rodaballo con infusión de perejil y un pequeño surtido de postres que incluia una crema de puerros con chocolate! (quizás lo más flojo). Buena cocina asentada en la tradición con influencias francesas.

Todo ello regado con un par de botellas de Chablis Louis Latour Premier Cru 2000 (17€) en copas Schott. Temperatura perfecta, servicio sin ceremonias. La carta de vinos interesante y aunque no extensísima sí más que suficiente, precios por debajo de lo habitual en la zona con alguna nota discordante.

4 comensales por 110€ todo incluido, no exactamente barato pero la calidad media de lo servido lo justificaba. Volveremos para pr

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar