Fuimos a comer el domingo volviendo de viaje y solo teniamos como referencia lo que habiamos visto en Verema. Ya me resultó extraño que al llamar para reservar mesa se quedaran un poco extrañados... y es que estuvimos solos y como nos explicaron es un sitio de tapas donde tienen al fondo unas cuantas mesas que si alguien lo pide lo habilitan para comer. El local es agradable y parecia que la atencion era buena. Nos "cantan" la carta ( que no hay ni carta ni lista de vinos) y parecia sugerente. Primero elegimos unas "habitas frescas con foie" . Y aqui empieza el espectaculo: Nuestra mesa estaba en un altillo y justamente debajo tenian un arcon congelador donde la cocinera salia cada 2 minutos a buscar algo. Pues bien, nada mas tomarnos nota aparece la cocinera y saca del congelador un paquete de habas. Mal empezamos... porque frescas si que eran,y mucho... No dijimos nada y aparece en la mesa un plato con unas habitas del tamaño de una moneda de 2 euros y con trozos de jamon. Nos llevamos una a la boca y la piel parecia cuero envejecido. Lo dejamos intacto y llamamos al camarero diciendole que eso no eran habitas frescas con foie sino habas congeladas con jamon. Pues bien, él nos contesta textualmente: Son frescas pero las ponemos en el congelador para que aguanten y si que tienen foie pero solo las salteamos con él y luego se retira... Vamos, como el tocino que ponia en el cocido del Domine Cabra, que lo ataba con un hilo y lo metia 2 segundos al agua para que cogiera sabor reservandolo para el siguiente dia...
Pero bueno, nos ofrecio otra cosa y tengo que decir que a partir de ahi no fue todo tan malo. En total comimos:
- Ensalada de perdiz escabechada: buena
- Calamar de pota a la plancha ( este no vino a buscarlo al congelador): estaba bastante bueno
- Lomo de vaca a la plancha: Dados a la plancha acompañados de patatas y pimientos de padron: Normal
Para beber un bobal 100% La casilla 2007 de Manchuela. BIen.
La cuenta ascendio a unos 60 €. No estuvo tan mal al final, dado el comienzo pero no lo recomiendo en absoluto dada la oferta de tapeo de la zona y que hay otros restaurantes en Albacete muchisimo mejores. El arcon congelador a la vista de los comensales me parece un detalle de mal gusto. SIn exagerar, la cocinera vino a él a coger algo o a poner algo dentro unas 10 o 12 veces. Supongo que entre mi comentario y el anterior la situacion o el público que acude ha cambiado y los objetivos del local son diferentes.