Cercano a la playa de San Lorenzo y de la competicion de la Copa Davis, decidimos ir a cenar. Su decoración es la de un mesón castellano pero con sidrería en la barra, situándose el comer al fondo del mismo. Las mesas está vestidas con sencillez, al igual que la vajilla, siendo las copas correctas. Eran finas.
La carta de vino es corta. Hacen especial incapie en los vinos de Rioja, Riberas, Cangas de Narcea, Ruedas, Sidras, Albariños, etc.
Su carta se compone principalmente de una oferta amplia de distintos menús, raciones y pequeña carta.
Pedimos fuera del menú, una ensalada Mixta (5,00). Bién, enorme u fresca.
Optamos por el menú denominado Copa Davis (22,00), que consistía de :
- Fuente de embutidos Ibéricos. Con su jamón, chorizo, chorizo blanco, lomo y cecina. Buena ración y eran ibéricos.
- Bugre(Abrecanto) con merluza. Correcto plato. La merluza fresca y acompañado de una salsa de marisco. El Abrecanto, jugoso y terso.
De postre : Tarta Helada, de fábrica y un yogut natural. Ambos discretos.
Para beber, incluida en el menú, una sidra de escanciar, estaba fresca, con su punto de verdor y acidez. Servida por un original intrumento que nos pusieron encima de la mesa. No desentonaba.
El servicio es diligente y profesional.

Dos gratas visitas a este restaurante de cocina tradicional, para probar dos de los menus especiales que tienen, uno con arroz con bogavante por 25 euros que estaba bastante bien y sobre todo un menu con caldereta mixta que tambien lleva bogavante y sale a 45 euros por persona que estaba exquisita, una de las mejores calderetas que he probado nunca.
El local es bastante agradable y recuerda a los antiguos mesones, la carta de vinos no es amplia pero sorprende la presencia del crianza de Pago de Carraovejas.
En general muy buena nota