Situado en el corazón del elegante Mayfair, es un restaurante frecuentado por parte de algunos miembros la Familia la Real Británica.
Sin embargo el trato del servicio de sala es absolutamente profesional y caluroso. Se desviven por hacerte agradable la estancia en el restaurant. Te hacen sentir especial. Mantelería de hilo, salvamanteles y cubertería de plata...
Normalmente antes de conducirte a tu mesa te invitan a tomar un aperitivo en uuna "isla" expositor en la que puedes apreciar los distintos tipos de ostras que constituye su oferta del día; no en vano, una de las especialidades ofertadas por la casa es ostras acompañadas de champagne, bien como preparatorio de la cena/comida, bien como consumición única. La carta contempla todo tipo de mariscos, frutos del mar, pescados, ahumados, caviar y platos de temporada (caza),alguna carne (incluido steak pie) y cremas calientes. Buenos postres de corte británico (pies, crumble y triffle -en las fiestas navideñas-), insisto en lo de británico, por esa tendencia de algunos restaurants del Reino Unido de imitar a la repostería francesa.

En resumen:
Los mejores pescados y mariscos cocinados de manera sencilla, para apreciar todo su sabor, amén de algún pie, de Londres. Destacable por su calidad el lenguado (dover sole).
Bodega a unos precios altos.

Ambiente impresionante, con una decoración con reminiscencias art noveau que transporta a los felices años 20. En este atmósfera, la verdad, la comida queda en un segundo plano, solo entar en el local supone una experiencia. No obstante sirven buen pescado, especialmente el lenguado de Dover. Sin emabrgo, la verdadera especialidad son las ostras y el champagne. A ser posible deben degustarse en su barra desde donde se puede apreciar mejor su preparación y el ritmo frenetico del servicio.
Lugar frecuentado por personalidades de la talla de jefes de estado, actores, y VIPs en general. En mi última visita Camilla Parker Bowles se presentó allí a cenar.
Eso sí, caro incluso para Londres.