Buena sidrería

Buen ejemplo de la restauración casca, restaurante elegante y sobrio, muy clásico pero con buena materia prima. Al tratarse del mes de agosto, no hay demasiados clientes, pero me indican que normalmente trabajan bastante bien, cosa que no me extraña.

Los platos son abundantes (al menos los que hemos probado) y estan bien praparados.

Comimos una "Ensalada Martintxo" compuesta de varios tipos de ensalada, gambas, champiñones y almejas, unas croquetas caseras que estaban muy buenas y por ultimo una pieza de carne de nombre "Carne Roja" que creo que era una pieza de chuletón de buey. Para postres compartida una ración de queso con membrillo y nueces. Finalizamos con un café.

La cuenta ascensió a 60€ con botella de rioja de la casa, no está mal, pero no se puede ir todos los días.