Nueva visita a mi templo . Agradable y relajada cena de sabado . Empezamos con entrantes detalle de la casa : primero unas tiras de papa casera al aceite de trufa blanca ( impresionantes ) para las claritas . Luego y ya entrando en materia espuma de tortilla de patata con sal de iberico , muy bueno .
Como entrantes nos decantamos por : flor de huevo ( base de patata rota , crema de boletus y foie , huevo de corral . Mi preferido ) y unos buñuelitos de bacalao buenísimos ( receta de la bisabuela ) . Estando dentro de la semana gastronómica , como plato principal nos decantamos por un chuletón de buey espectacular ( no se lo que pesaba , pero dió para 3 pax , buenísimo ) . Todo esto regado por un buén Mestizaje Magnum . Servicio del vino a cargo de Belén a un nivel muy alto . Servicio en sala ( David ) a la altura .
De postre una tarta de manzana para compartir , muy buena ( ya no podíamos mas ) .
De nuevo , disfrute total !!! Siempre en continua evolución y mejora en todos los sentidos .

En todo, comida, bebida, servicio.
Es cierto, se paga, y en este caso lo consideramos bien pagado.
Erizo relleno de Txangurro, sepieta de playa con verduritas y buñuelos de bacalao. Como aperitivo una sensacional version de la tortilla de patatas en mousse.

De segundos Tacos de Bacalao, steak tartar(quizas para mi lo mas flojo pero porque lo prefiero cortado mas gordo)y un plato de huevo pochado con patatas, setas, foie y aceite de trufa blanca que estaba sensacional, contundente pero soberbio.

Postres al nivel del reto de la cocina muy ricos, dos postres de horchata, en flan y en torrija, chocolate, y un sorbete de mojito. Habia un tatin de platano que prometia.

Buena bodega, carta y servicio. Cuatro tipos de pan.

Quería probar este restaurante y se confirma el acierto. Unos entrantes excelentes, jamón, huevos y un marisco (gambas y cigalas) de muy buena calidad y con un toque de sal y plancha perfecto. De segundo presa ibérica y lenguado ambos bien elaborados. Buenas materias primas sin mucho añadido artificioso. Los postres también a la altura.
El servicio excelente, vino siempre en la copa sin tener que pedirlo. Muy atentos en todo momento. La decoración del local, cubertería y vajilla a muy buen nivel. Amplio surtido de vinos dulces y licores. Lo único malo el precio, 150 euros por cabeza (sin vino que omito de la cuenta pues era una celebración especial y desvirtúa el resultado final). En resumen muy bueno (y lo bueno es caro pero merece la pena).

Llevo ya muchos años siguiendo la evolución gastronómica de Ximo . Lo descubrí en Casa Ximo ( Port Saplaya , hace ya casi 10 años ) , le fuí fiel y ahora cada vez que le visito en Ximo Saez ( que son muchas veces ) disfruto como un enano . En sala Belen , esposa y esforzada similler hace las delicias de los comensales con sus conocimientos y su simpatía . El local , con apenas 1,5 años de existencia , me parece muy acogedor , elegante y con separación entre mesas muy generosa . En el fondo del restaurante existe una sala privada con mesa redonda de hasta 10 pax impresionante . Coperio Riedel con servicio del vino cada vez mas completo . Entre semana dispone de menu de trabajo por 35 mas iva mas bebida muy equilibrado . Mis entrantes preferidos : buñuelitos de bacalao y la crema de foie , boletus con base de patata y huevo campero con maldon . Suele tener muy buenos mariscos ( no los frecuento ) . Para mi los arroces excepcionales : secos ( el de boletus y foie ) o melosos ( como el de canela con alcachofitas y ajetes , impresionante ) . Los postres muy buenos ( hay que probar el culto a la horchata ) . Carta de vinos amplia y muy variada . Los gin-tonics , impresionantes . Enhorabuena , Ximo .

Debido a mi ajetreado trabajo como empresario, me he visto en el compromiso de buscar ese lugar tranquilo,acogedor,donde predomine el buen gusto tanto en el entorno como en su cocina, sin olvidar por supuesto una cálida atención. En mi búsqueda de ese "Lugar Perfecto" ideal para reuniones de trabajo y personales, al cual llevar a mis invitados, ese lugar donde sorprender a mis amigos, donde celebrar una fecha especial,donde compartir con la familia,con la plena seguridad de haber acertado y del cual poder salir orgulloso dejando en alto la calidad y exquisitez de la cocina Valenciana ante aquellos de fuera. Después de muchos años de haber escudriñado en guias y revistas gastronómicas, después de haberme guiado equivoca mente por especialistas y críticos en el tema, he dado carpetazo a todo y me he dejado llevar por mis sentidos; tras un largo recorrido por mi Valencia, por fin, lo he encontrado!
Acogedor, Cálido, Sobrio, Elegante, cuidado hasta el mas mínimo detalle, comida excelente; productos de primera calidad, excelencia en mariscos y arroces. Mezcla creativa entre cocina de diseño con el gusto y el sazón de nuestras abuelas, amplia carta de vinos y atención personalizada. La relación calidad precio bien equilibrada. Lo dicho: El Lugar Perfecto. No os perdáis esta experiencia para vuestros sentidos,os la recomiendo sin temor a equivocarme.

Interesantisima propuesta gastronomica y magnifica puesta en escena.
Entorno: Elegante y agradable, buena separacion entre mesas.
Servicio: Muy bien, agradable y discreto, sin estridencias, pendientes siempre de tu mesa pero sin agobios.
Servicio del vino: Excelente, buena cristaleria, cambio de copas en cada botella y envinado de las mismas. carta de vinos bien estructurada que incluye champagnes y algunos vinos extranjeros. faltarian algunas referencias mas "arriesgadas". Sumiller muy buena. Temperatura del vino perfecta.
Comida: Excelente marisco, entrantes y platos principales elaborados y muy bien ejecutados, tanto en carnes como en pescados. Los arroces originales y muy buenos.
Licores: Muy variados, gran seleccion de whiskys de malta

Lo que comimos: cigalas y gamba roja (excelentes), vieira (muy original con esa crema de queso... muy buena), fideua de foie y setas (excepcional).
y lo que bebimos: vinya la calma (fantastico)

En resumen: sitio al que merece la pena ir y que no desmerece a otros locales famosos de la ciudad. precio acorde con lo ofrecido. se permite fumar

El lugar, el entorno, la atencion, la cocina y sobre todo la calidad es impresionante.Despues de recorrer durante muchos años gran parte del pais y del extranjero, he conseguido encontrar el entorno y situacion perfectos para realizar cualquier tipo de reunion(familiar o negocios).La cocina es innovadora pero a su vez respeta las tradiciones culinarias de su comunidad, ofrece platos que respetan los sabores,la tradicion,el producto y sobre todo, los diferentes gustos de su clientela, el trato personal es exquisito y te ofrecen distintas posibilidades gastronomicas que se adecuan a todos los bolsillos, gran bodega y un menu asequible a cualquier persona.

He estado con 5 compañeros del trabajo. Pedimos el menú mediodía ( 35 € + Bebida) que consta de dos entrantes, un arroz a elegir y postre. Elegimos el meloso de foie y setas que estaba exquisito y nos impresionó su sabor. Para beber nos tomamos con los entrantes un Alvarez Nölting Chardonnay y con el arroz un Manuel Manzaneque Syrah que tenía ganas de probar y aún no había tenido la ocasión. Diferentes copas para cada vino todas Riedel. Ambos me gustaron. Después del café nos dimos un caprichito de un whisky (muy buena variedad) y un purito que se encargó la sumiller de encenderlo con mucha profesionalidad y mucho cariño. Servicio muy correcto. Estuvimos muy agusto.

Magnifica puesta en escena, agradable decoracion, clasica tal vez, con pequeños toques modernistas, pero que finalmente consigue crear su propia atmosfera.Buena separacion entre mesas, espaciosas, intimas y con el encanto de una luz tenue que emana de la lampara de sobremesa.Estupenda conservacion de los vinos, muy bien tratados por cierto, buen envinado, bien servidos, atentos al trago, copas adecuadas a cada cambio del caldo elegido, con una buena carta clasificada por tipo y zona, tal vez no sea descarada en pretensiones,tal vez le falte alguna picardia.
Sobre la cocina, muy bien, platos muy elaborados, bien conseguidas las texturas de los pescados, y sobre todo bien presentados.Ya se que es un poco caro, ningun plato baja de los 20€, ¿pero que puedes pedir si hay tres personas atendiendo tu mesa?, sumellier incluido, chef que abandona los fogones para obsequiarte con sus propuestas, una jefa de sala encantadora y otra persona pendiente de que no te falte pan en cualquiera de sus variedades que te ofertan.Ese servicio hay que pagarlo, por lo demas nadie debe salir sin probar su delicioso postre de ORXATA, es una delicia!! ademas de disponer de una carta de postres que brinda la oportunidad de vinos para la ocasion.Creo que este restaurante puede ser un gran referente si observa con rigor lo que ofrece en la actualidad, no puede ni debe bajar un apice su nivel, mucho menos en la zona en la que esta ubicado.

Me comontaron de este restaurante de reciente apertura y el viernes por la noche decidimos asistir . la experiencia la considero muy gratificante. tomamos el menu degustacion que constaba de 6 platos bien equeilibrados para que te sientas totalmente sadisfecho, la sumiller muy atenta y es de agradecer que el propio Ximo te tome nota y te esplique cada plato. Tomamos Pago de Los Balagueses 05 Syrah .El menu 50€ por persona y el total 136€ los dos . me parece una muy buena opcion , mi puntuacion es buena pero estoy seguro que seguiran mejorando.