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En pozuelo de Alarcon hay muchos restaurantes pero ninguno como el puerto, un restaurante que engaña de lo grande que es,pasas por la puerta y nada mas entrar te encuentras una exposicion de sus mejores mariscos vivos, luego encuentras esa magnifica barra de madera noble y otra segunda exposicion de mariscos y pescados de gran calidad, luego esos tres salones que lo combierten en tan especial restaurante: el pequeñito y mas intimo, el mediano y mas familiar, o el grande y mas señorial de todos.
El servicio solo se puede describir con una palabra "excelente".
La comida insuperable, para empezar unas cigalas de tronco, unas gambas y unos chipirones con habitas, de segundo un besugo a la bilbaina, y mi acompañante unas cocochas de merluza al pil pil, en el postre una excelente tarta casera de chocolate blanco chocolate negro y frambuesas y una tarta de queso.
Al salir el servicio nos despidio de una agradable forma.
Al llegar al coche el aparcacoches nos abrio las puerta y nos pregunto que tal habiamos cenado y la verdad le dije que volvere
Se presenta como la mejor opción de Pozuelo para pescados y mariscos, sin desmerecer las carnes. Servicio atento y profesional, algo atropellado en la terraza. Muy buena materia prima, desde el jamón, las croquetas (mejor las de carabinero),las gambas, percebes, una lubina a la sal de primera. Tranquila y jugosa cena. Forma parte de mis imprescindibles, si no cambia:).
Postres caseros muy cuidados, en general la presentación de los platos es muy correcta.
Venga, un pero, la dichossa carta de vinos sigue siendo desordenada, aunque el servicio sigue siendo más que correcto.
Local espacioso con terraza adecuado para una velada nocturna en verano nos acomodamos en el interior espacio entre mesas suficiente
Servicio rápido, profesional y cortes.
Buena materia de primera calidad, ostras espléndidas, buenísimas y caras gambas alistado de levante, buen jamón, cañaíllas de gran tamaño y arroz con rape y almejas.
Todo el menú regadito con Champagne Moët et Chandon Rosé - Millésimé 1999 y cafes una buena comida y un lugar recomendable
Le teníamos echado el ojo al restaurante desde hace tiempo, pero nunca nos habíamos decidido. Con la noticia de que había sido galardonado con el segundo premio del Concurso Nacional de Pinchos y Tapas Ciudad de Valladolid con su tapa "Pollo de corral con aromas de campo" nos decidimos por fin.
La sola presentación de la tapa bien merece una visita, una tapa o un truco de David Coperfield? Humeantes aromas en una preciosa caja de metacrilato atesoran un mini bocado crujiente y del que para describirlo copio literalmente “Esta tapa es una exquisitez, se trata de un cilindro de pollo de corral relleno de yema de huevo líquida que ha sido previamente aromatizada con aceite de trufa y Jerez. Posteriormente, este cilindro se ha rebozado con pistacho verde caramelizado y para facilitar un mejor contraste de sabores, se ha incluido además pimienta rosa y sal Maldon roja”.
y es que hay que hacer especial hincapié tanto a la calidad de la materia prima como a la presentación de los platos. Celebran su primer aniversario invitándote a una copa de Taittinger que hace presagiar que nada malo viene a continuación.
Gamba roja “alistao de levante” de una calidad superior, el mero negro con callos de bacalao sobresaliente y la ventresca impecable, y os lo digo después de dos años de verano en Barbate. Anchoas “00” pero “00”, las croquetas de carabinero perfectas de sabor, aunque algo faltas de jugosidad.
Carta de vinos, con variedad de cavas y champagnes, variada pero algo desordenada. El tratamiento del vino es correcto en temperatura y servicio.
Postres elaborados y bien conseguidos, el pan de aceite y chocolate así come el yogurt con mango, muy bueno.
Local amplio, bien y profesionalmente atendido hacen muy grata la velada.
4 pax 300.-€ (Olvena Chardonnay 2006 12.-€ + Abadia Returerta S.E. 2004 24.-€)