Predominio de la forma sobre el fondo
Restaurante ubicado en la planta primera, sin ascensor, del hotel del mismo nombre, en el casco antiguo de Olite. Decoración clásica. Mesas de buen tamaño y bien vestidas. Sillones muy cómodos. Buen menaje, copas mejorables. Servicio algo lento, con alguna dificultad para entenderse con los empleados extranjeros. Disponen de una carta no muy larga, con opción de medias raciones en casi todos los platos, y un menú de 26,-€, que se queda en 17,-€ para los clientes del hotel, con 4 primeros, 4 segundos y 4 postres a elegir, incluido pan y bebida.
Almorzamos el menú. De primero:
- Arroz meloso con marisco - Más bien caldoso. Insípido y con el arroz pasado.
- Coca con vestresca de atún, tomate y cebolla caramelizada - Buena.
De segundo:
- Milhojas de solomillo con manzana y ciruela - Insípido, en especial la manzana.
- Variado de pescados fritos - Merluza, rape, rodaballo y algo más. Bien.
De postre, dos de arroz con leche que se tomó mi mujer. Lo mejor de la cena.
Una botella de agua y una de vino rosado Ochoa 2010, que trajeron a buena temperatura.
Por 26,-€, no lo tomaría de nuevo. Por 17,-€, bien.
Sin conocer la zona, no me acabo de convencer.
Aparcamiento gratuito a unos 200 m., fuera de la muralla.
