Restaurante con una amplia carta y excelentes arroces en La MAncha!!!! He ido muchas veces, en pareja y en grupo ya que, excepto fines de semana que es mejor reservar, gracias a la amplitud del local, es facil que te den sitio. Me gusta porque la carta se adapta a lo que te apetezca en el momento y a lo que te quieras gastar, y si no quieres salir de casa, te llevan lo que quieras!
Es cierto que tal vez no sea el mejor sitio para una cena íntima los fines de semana, ya que al estar tan lleno y ser tan amplio es algo ruidoso.

Restaurante con una mezcla de decoración neoclásica a la entrada, marcada por la presencia de espejos y ornamentos, y algo muy curioso, porque una vez dentro cambia a una zona amplia, con vigas de madera típicamente manchego en su disposición. Al fondo hay dos grandes hornos de leña, en los cuales hacen carnes, brasas y comida italiana. Manteles blancos inpolutos, cubertería correcta y copas simplemente funcionales. La carta de vinos es amplía, con selección amplia de vinos de España. La comida es francamente impresionante para los sentidos, aunque también es algo caro.