No sé, no sé

Local elegante con servicio muy amable. Quiza demasiado.. Estuvimos solos en el salon hasta el final de la noche ( 23:00) que llegó otra pareja y 4 personas a un reservado. Situacion un poco violenta, para mi al menos, dado que el personal de sala estaba de pié sin hacer nada y tienes la sensacion de que te estan mirando.
Primeros:
- Almejas marinera: bien la materia prima pero la salsa corriente
- verduras crujientes conm foie: muy buenas pero quiza mal definido el plato ya que pensabamos en una tempura y eran cocidas. Buen punto de verdura donde lo crujiente eran los tirabeques.
Segundos:
- Degustacion de bacalao: 3 trozos ridiculamente pequeños uno al pil pil ( sosisimo), otro a la vizcaina ( el mejor, pero malillo) y otro al ajo arriero o ranero ( parecia tomate frito de bote).
- Lomo de ciervo: La calidad de la carne buena pero la salsa que no recuerdo era una mermelada como de frutos rojos dulzona. Que mania encuentro ultimamente en los restaurantes en abusar de estos contrastes donde la tipica salsa de frutos rojos suele ser una mermelada de bote.

Como quedamos con un poco de hambre pedimos un postre para compartir. Nueces ( con un nombre sofisticado) con crema de vainilla o algo asi. Pues bien eran nueces bañadas en azucar quemado con una especie de nata avainillada. Salvo este toque de vainilla ( sumamente dulzon por cierto) era el tipico postre de restaurante chino.
Para beber un Aljibes Cabernet franc bien servido.

No lo recomiendo. Es un sitio elegante pero demodé conuna comida bien presentada pero que no entusiasma. Se paga.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar