RECTIFICAR ES DE SABIOS......
Primero antes de nada presentarme, mi nombre es Carles Barneda, Jefe de Cocina del Restaurante Vil·la Alexander. Es la primera vez que entro en esta página y el motivo por el cual lo hago es simplemente para comentar una crítica que no considero constructiva y por lo tanto no comparto. Soy totalmente consciente de que las críticas son la gasolina que alimenta el sistema de calidad de cualquier empresa, en este caso de nuestro Restaurante, pero al mismo tiempo deberían venir de alguien que realmente conozca el producto que está consumiendo. Efectivamente, el Menú era para picar, cada plato para 3 personas, pero no era de postre, sino la medida del plato era de 32 cm. de diámetro. Lo que parecía maridado de atún era carpaccio de secreto ibérico con aceite de trufa y pistacho garrapiñado. Berberechos con cilantro eran berberechos al vapor con lima y anís estrellado. Sorbete de melón era zumo de melón cantaloup licuado con albahaca y textura efervescente fizzy. Solomillo de ternera era entrecot con varios puntos de cocción según habían pedido. Dorada con sofrito de alcachofa era suprema de dorada a la donostiarra con patata violeta y chips de alcachofa. Y para acabar, el redondo de hojaldre relleno de tarta de manzana con helado de leche merengada era tatín de manzana con helado de canela. En cuanto al servicio, el Maitre comenta que la crítica tampoco se corresponde a la realidad. Dicho esto, creo que la credibilidad personal es lo más importante en nuestra sociedad. Hay que conocer bien de lo que se habla antes de opinar. También creo en la libertad de expresión.