Es como estar en casa
Conozco este restaurante desde el primer dia que se abrio al publico. He cenado infinidad de veces, con distintas personas, y todo el mundo ha salido satisfecho de este local. La comida fantastica, productos frescos del mecado central, escogidos con mimo dia a dia, las raciones son perfectas para poder probar varios platos, entre ellos, el suquet de pescado, las gambas al ajillo, albondigas con salsa, distintas ensaladas, pulpitos con habas, etc la bodega se acopla perfectamente a la carta.
La dueña es digna hija de su padre "Casa Pepet" y sus exquisitas gambas al ajillo, te atiende como si estuvieras en su casa, y sobre todo con su mejor sonrisa.
En definitiva, si quieres cenar o comer muy bien, con una calidad/precio en su justa medida, tienes que probarlo, y seguro que repetiras mas de una vez¡¡¡¡