Discreto, opción de buffet

Enésimo restaurante de cocina oriental. Decoración alejada del concepto asiático que tenemos, cómoda y funcional. Mantelitos individuales y copas (Rona) diferenciadas para agua y vino. Aunque no pedimos vino, si que pude echar una ojeada a la carta, bastante más completa de lo que es usual en este tipo de restaurantes. Pedimos rollitos primavera y de pato, pincho de gambas, bolsitas (ahora no recuerdo el nombre "técnico") al vapor rellenas de carne y gambas, sushi variado, maki de langostino rebozado, pollo con salsa especial y arroz especial.
En mi opinión nada por encima o por debajo de la media, aunque el sushi me pareció francamente discreto. Señalar que aunque disponen de carta, el restaurante parece enfocado al concepto de buffet libre servido en mesa (9 euros mediodía, 14 euros noche y fin de semana). Atención amable como se presupone en esta clase de sitios, ningún problema con el idioma.