Singular

A los vulgares bebedores de cerveza y fumadores de Fortuna se nos queda cara de tontos, de albañil venido a más, cuando llegas por primera vez a este local. Ni se fuma -aplaudimos, pese a todo, la decisión- ni se sirve cerveza: ¡con un par!

Cuando el amigo Ferrer explica su filosofía, con saber, pasión y un punto sano de vehemencia, ya no crees que es un snob, sino un kamikaze. El tío convence, la verdad.

Por lo demás, un local extraodinario, amplio, luminoso y bien situado. Un servicio bueno -extraordinario, a la hora de los caldos- y una comida que, al menos el día de mi única visita, tampoco deslumbra aunque no desmerezca.

En el debe: fuimos crujidos al confiar en el sumiller la elección de los vinos. Es lo que tiene ser un pobre venido a más o un rico venido a menos.

  1. #1

    Katan

    ¿Un 5 en cocina y un 4 en calidad/precio? hummmm, a hostias sales :-)

  2. #2

    Davinci2

    Joer...lo de la cerveza y el tabaco no lo sabía...¿y que? con dos cojones...

    SALUT¡¡¡

  3. #3

    vser

    Llamándose ENOPATA lo de la cerveza tiene un pase, pero lo del tabaco no. Un buen habano al final de la comida es una requisito imprescindible. Supongo que café y copas si servirá ¿o tampoco?

  4. #4

    Juan4886

    Sin ánimo de molestar y desde mi humilde opiníón, hubiera estado bastante bien que además de los comentarios acerca del Tabaco y la Cerveza, explicaras qué comiste y qué bebiste. Considero que éste es un instrumento que puede y debe permitir a "terceros" hacerse una idea del local que quieren o están pensando visitar. Después de la lectura de tu comentario, el cual evidentemente respeto pero no comparto, veo bastante difícil que alguien pueda hacerse una idea de lo que en Enópata se hace. Reducir la visita a un local de esas carcaterísticas, amén de los comentarios de "tabaco y cerveza" a un simple "y una comida que, al menos el día de mi única visita, tampoco deslumbra aunque no desmerezca." me parece que es hacer muy poca justicia y un flaco favor a quien no lo conoce. Darle a la comida un 5, salvo que en los platos que te sirvieron (y que desconozco) hubieran sido especialmente crueles en los tiempos de cocción o presentación, me parece injusto. Pero en este sentido sólo tú sabrás el porqué de tu calificación, aunque imagino que a más de uno le gustaría saber en qué basas tu puntuación, y aquí descarto el capricho personal.

    No entro a valorar lo caro o lo barato, hay platos de 10 euros que pueden resultar carísimos y otros de 30 tremendamente baratos. En cuanto a los caldos, sin comentarios, poco se puede añadir a lo dicho en múltiples críticas precedentes. Si entras en un concesionario de Ferrari (y en Vinos no se me ocurre mejor comparación para Enópata) no puedes pretender llevarte uno al precio de un Kia.

    Recibe un cordial saludo.

  5. #5

    JuanFerrer

    Por desgracia es habitual que muchas personas confundan la relación Calidad-Precio con lo barato.
    Una cerveza que cuesta 0,18 cobrada a 2 euros puede parecer barata, cuando en realidad se está aplicando un 1.100% de margen.
    En todos nuestros vinos cobramos diez euros lineales por botella, y todos ellos están disponibles por copas (sopladas) sin sobre precio.
    En nuestra carta de vinos ofrecemos a los clientes y amigos que escojan su nivel de precio por copa, cuando esto no sucede, y el cliente no se define en un segmento u otro de los ocho que ofrecemos, queda a elección del sumiller (un servidor) los vinos a servir.
    Los clientes suelen ofrecerme muchos indicios que me indican el nivel de calidad de los vinos a servir en la mesa. Aunque a veces, especialmente cuando tratan de pasar por entendidos, suelo confundirme y ofrecer vinos de mejor calidad (que habitualmente son de precio más elevado) que la esperada por el cliente, con el consiguiente disgusto.
    Si tuviera mi carta de vinos plagada de botellas que cuestan cinco euros y los vendiese a quince, estoy seguro que Enópata tendría una mejor calificación en su relación calidad-precio. Si comprase lomo de atún a 12 euros (en vez de a 29) el kilo, que lo hay y lo disfrazase un poquito con una salsita, y cobrase el plato a la mitad de su precio, seguro que algunos desavisados me darían una mejor puntuación en la relación calidad-precio.
    Si en vez de los tomates que compro a 6 euros el kilo, comprase los de 1,20, podría cobrar más barato el plato, ganar más dinero, y obtener una mejor puntuación, si la ventresca de atún rojo salvaje o la Dorada salvaje la substituyese por una sardinita la cuenta sería menor, si nuestro jamón ibérico de bellota lo cambiase por un recebito pasable sería más barato, o si nuestro café en vez de ser Volcán de Oro fuese otra marca de esas que cuestan 5 euros kilo, tendríamos mejores puntuaciones; pero en mi opinión, no es ese el tema, nosotros queremos ofrecer el mejor producto que podamos comprar, aun a costa de sacrificar nuestro margen de beneficios, y confiamos en que los clientes sean capaces de apreciar esa superior calidad en el plato, aunque a la vista de esta y algunas otras críticas no siempre lo conseguimos o lo consiguen ustedes apreciar en su justa medida.
    Confío en que todavía existan muchas personas a las que les deslumbre el sabor, la textura y el aroma natural de los alimentos.
    Es una pena que la mejor materia prima, poco disfrazada, (sin espumas, papillitas, gelatinas ni deconstrucciones o falsa creatividad) elaborada en el momento en que la pide el cliente (a la orden, no varias horas antes) y ofrecida con honestidad en una vajilla y cubertería inmejorables no sea apreciada en su justa medida.
    A pesar de todo ello, en enópata se puede comer o cenar por 35 ó 40 euros, auque por ello no esperen los mejores vinos del mundo, sino vinos honestos y ¡estos sí! De buena relación calidad-precio.
    Uno en su sano juicio, no puede pretender beberse cinco o seis copas de magníficos vinos de Borgoña, Champagne, Ródano, Burdeos, Piamonte, Mosela, Jerez, Priorat o Alsacia (por poner algunos ejemplos), y acompañarlos de cuatro o cinco platos con materias primas de primera calidad y salir por 30 euritos, porque eso no es así, simplemente es algo que no existe, y si lo pretende se estará mintiendo a sí mismo y obligando a los restauradores con mayor espítiru comercial y menos escrúpulos a entrar en ese juego siniestro de servirle sucedaneos de sucedaneos todos bien pasaditos por la Thermomix o el PacoJet, eso sí.

    Estoy seguro que para algunas personas (inmensa minoría) un buen habano es un requisito imprescindible para poner el colofón a una buena comida, pero para la casi totalidad de catadores y aficionados al mundo del vino, una atmósfera limpia de olores es un requisito irrenunciable a la hora de degustar un gran vino.
    Y en Enópata, el vino es lo primero, y también los destilados, de los que disponemos una buena colección formada por más de 400 etiquetas de todo el mundo.

    Gracias Juan por tu opinión y defensa, a mí los Ferraris también me parecen coches baratos para la enorme calidad que ofrecen, por más que sepa fehacientemente que nunca podré tener uno.
    Saludos cordiales y felices vinos
    Juan

  6. #6

    Marilo

    Hola profe!!( a Juan Ferrer)
    Pese lo que nos pese, es nuestro sino.
    Pero seguimos por todo aquel que nos aprecia y nos estima, los que nos dan fuerza para seguir adelante, y al que no nos entienda pues para eso estamos en democracia, no te parece?

    ciao a tutti !!!!

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