Restaurante de cocina creativa de mercado. Aunque se encuentre en una

Restaurante de cocina creativa de mercado.
Aunque se encuentre en una calla un poco rebuscada se merecería estar en el centro de la ciudad. La carta no presume de cantidad de platos, pero aunque no se quede corta, gracias a ello cada plato es un mundo y delicadeza en su presentación. Realmente hablamos de cocina creativa y con gusto. La atención es excelente y la explicación y consejo sobre cada plato aún mejor.
La carta de vinos es muy aceptable, precios razonables, aunque encaminada a una gama para el consumo entre amigos, juvenil y de grupo.
Buen ambiente y diseño acorde al tipo de cocina.
No puedo opinar sobre los postres porque no los probé, pero sin ellos (dos platos y café) el precio oscila los 27 €.