Visita turística por Cadiz y después de tomar unos aperitivos en Casa Manteca, decidimos buscar un rte. Vemos una animada calle llena de restaurantes con terrazas y decidimos buscar uno que se adaptara a nuestros gustos. Vimos una correcta terraza y decidimos sentarnos. Buena temperatura en la calle que invitaba a permanecer en la misma.
Mesa con manteles de papel y servilletas idem. Vajilla y cristalería floja. El servicio animoso y cercano, pero te toman por "guiri".
Seis personas a la mesa ydecidimos compartir:
De entrantes: Tortillas de camarones, 6 piezas(6,60), nos recordaban a las de un conocido supermercado, muy discretas.
Papas Alinás(3,50), correctas.
Surtido de pescado(14,00), mal, nos encontramos con una vulgar fritura.
Urta a la plancha(48,00), gran pieza, muy fresca y con un magnífico punto de plancha. Esto nos alegró la comida y nos salvó de la mediocridad.
Postre: 2 de Panqueque(3,70), postre argentino basado en el dulce de leche, gustaron.
Delicias de Naranja(3,60), correcto.
Sorbete de limón,(3,60), discreto y refrescante.
Cafés(1,50), infusiones(1,50).
La carta de vinos es discreta. Acompañamos la comida con un rosado M. Aragón(12,00) y tinto Viña Lucia(12,00). Armonizaron correctamente la comida.
El servicio del vino se limita a abrir la botella y acompañándolas con una champanera. Nos cambiaron de copa en el cambio de vino. Aguas minerales, cañas de cerveza.

Restaurante argentino situado en el barrio pesquero de la Viña,con una aceptable comida,mezcla de lo argentino y lo gaditano,servicio muy amable y atento,y eso que había mucha gente,por lo del carnaval...Comimos en la terraza,por lo que no puedo opinar del local.Sobre los vinos,nada,buena carta(tomamos un blanco Etchart)pero en copas malas.En general es un buen sito,tanto por el pescaíto frito como por todo lo demás... Buenos precios.(Ah! Su salmorejo está de lujo)