Pirita es difícil de conocer a no ser que vayas acompañado de alguien de

Pirita es difícil de conocer a no ser que vayas acompañado de alguien de la zona, ya que se encuentra en un entorno industrial, concretamente en el Polígono San Cristóbal de la capital Vallisoletana.
Nunca en mi vida había visto tanto Pago de Carraovejas como en ese restaurante, incluidos formatos mágnum.
Buena cocina y trato muy agradable, el jamón de Guijuelo, de lo mejorcito y las gambas de Huelva, espectaculares. Las carnes en su punto y el surtido de postres “de llorar”
Acompañamos toda la comida con un Luzmillar crianza de bodegas Lleiroso, servido en copas mas que correctas.
Hay zona para fumadores.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar