Voy de cuando en cuando por este bar porque me gusta mucho la calidad del producto que ofrece a precios bastante correctos. Los calamares con patatas panaderas y jamón están muy buenos, las navajas frescas y sabrosas, el tomate Raff con ventresca, pimiento y salazones muy bueno aunque un poco caro, ya que Luis te lo cobra según el número de comensales y eso a veces te puede variar mucho. Las gambas y cigalas son buenas. También las quisquillas. Las verduras a la plancha no defraudan. La carta de vinos es aceptable, aunque yo añadiría alguna referencia. Lo peor, el menú de mediodía. Lo probé una vez y me pareció como de colegio...
Como apuntan, cuando el tiempo es bueno, se está muy bien en la terraza, ya que dentro el espacio es un poco justo y el ruido alto.
Lo dicho, buen lugar para consumir producto fresco a la plancha, que no es poco...

Pequeño bar restaurante que pasa desapercibido si no lo conoces,pero que se cena bien .Nos tomamos varias cosas de picoteo ,calamarcitos encebollados,una clochinas muy buenas,pescadito frito ,6 anchoas con bquerones en vinagre,2 croquetas de jamon ,quiza lo mas flojo .Vinos practicamente inexistentes `por lo que nos bebimos varias cervecitas .La atencion buena y la rcp tambien .Buena opcion si estas por la zona y quieres comer de picar

Situado cerca del Hospital la Salud, tenemos este bar de barrio que tiene como principal activo una entrega familiar y una búsqueda de excelente materia prima de la mar. Yo recomiendo dejarte asesorar por Luis, para que te diga lo que puede cenar de picoteo como tellinas, huevas de sepia, gambas rojas, pescadito frito, calamares a la plancha, ensalada de tomate valenciano con esgarrat. La carta de vinos es muy corta donde priman los clásicos con incursiones valenciana. Cena para dos, ascendió a 83 €, si bien las 8 gambas eran 20€, magnifica RCP. Entre primavera a otoño ponen mesas fuera que aun lo hacen más agradable. En inviernos se limitan al pequeño local interior. Se permite fumar.