Se trata del típico restaurante de la zona, perteneciente a la familia de lucio (creo que a un hermano) y que tiene una oferta similar a la de Casa Lucio. Para mi los famosos huevos y los callos son los platos que´más merecen la pena de este sitio. He estado varias veces y siempre me ha parecido lo más destacado. La carne no es mala, pero no es la mejor que se puede comer en Madrid. Los pescados son pasables. De los postres, el arroz con leche está muy rico.
Por lo demás, sitio masificado, con mesas muy juntas, camareros más o menos eficientes pero nada simpáticos. Carta de vinos a mejorar.
Precio por persona: 60 euros más o menos. Por ese precio en Madrid tienes mejores restaurantes, pero si te das una vuelta por la zona no deja de tener su encanto meterte en un sitio de estos a comer.

Hay otras cosas para disfrutar de un restaurante.
Local tipico bodegon añejado, separacion entre mesas escasa, cristaleria a mejorar.
Servicio correcto, y materia prima buena y bien confeccionada, los huevos estrellados un poco secos y la patata estadiza, cocochas al pil pil de buen tamaño un pelin suelta la salsa, pero repetiria otra vez con el plato.
Vino, creo que en esta categoria tienen que mejorar mucho, me parece que un vino tomado en un lugar como este merece mejor trato, copas inadecuadas que no permiten el disfrute y tienes que pedirlas si no, no las cambian y las que ponen si se caen al suelo no se rompen
por el grosor del crital.