Muy buena opcion

Muy buena opcion especialmente a medio día, donde encuentras un menú y una buena cocina por 14€. En nuestro caso y con salida del AVE a las 5 de la tarde, es una opcion perfecta despues de aparcar en Renfe y caminas 6 minutos hasta el restaurante.
Local ya descrito, pequeño pero acogedor; pocas mesas en servicio a pesar de la calidad y el precio. Servicio muy bueno justo en el punto de amable, correcto y conocedor del tema. Platos cubiertos, copas, etc.. de buen nivel.

Cuatro para comer y aunque íbamos ya con decisión a por el menú, no sé si existe otra posibilidad. En vinos son múltiples (muy por encima de la media en general más propio de locales de gama muy alta) y atractivas las posibilidades, con precios correctos; se nota que el tema de vinos es importante en el local.

Mientras elegíamos y llegaban los entrantes, un grave peligro: 3 estupendas clases de pan (nueces, blanco -algo fresado-, y 6 cereales con un aceite macerado en caliente con romero (intenso de romero); eso a las 15 horas y casi sin desayunar es como dar la salida de los 100 metros libres. Hubo que repetir dosis de pan para la comida.
De primero 2 raciones abundantes, bien presentadas de tomate valenciano cortado en láminas, con unas lonchitas de tollina y helado de albahaca. Otras dos raciones de tortas (2 por plato) de calabacin con hummus pero hecho con alubias, muy interesantes, aunque quizás un poco más crujientes estuvieran mejor (opinable).

Para segundo fueron 3 de su especialidad de arroz con verduritas cortadas en porciones pequeñas, meloso, muy bien de sabor, buena ración, con gran fondo (más allá de las verduras), arroz suelto. Completamos con una ración de pasta con setas y bien trabada con queso fundido; me comentaron que buena de sabor, pasta al dente, buena ración, buena cantidad de setas.

De postres tarta de chocolate correcta y dos de flan de piña en ración más ajustada pero suficiente, mejor el flan que la piña.

En la parte de bebida aparte de un agua pequeña y café con leche y cortado, se hace difícil elegir un vino por la cantidad de posibilidades que hay; al final opté por uno de los raros y más desconocidos, un blanco de sauvignon blanc y otras uvas minoritarias de la sierra de Granada, cosecha 2010, y de elaboración natural llamado Blancas Nobles clásico: interesante. Servido durante toda la comida (aunque no había casi trabajo de comedor por la hora)

Buena comida (aunque la materia prima no sea cara), buena cocina, buen servicio y muy buen precio (total 74.70€). Muy recomendable.