Nueva visita en la que noto una franca mejoría. Todos los comensales de acuerdo en la calidad de la materia prima, tanto el bacalao como la chuleta o el lomo de ternera, así como los postres, soufle de arándanos o pastel fluído de avellana. Bastante variedad en la carta de vinos, incluídos para postre; copas aceptables y temperatura correcta. Coto de Hayas Garnacha centenaria 11€.

Especialidad en cocina asturiana, aceptable. Excelentes los postres caseros. Las dos veces que comí no vi la carta de vinos, pues se servía menú especial de la huerta de la zona que ya incluía el vino y fue servido en copas y temperatura correctas.