Para recomendar a tu peor enemigo.

El sitio es muy bonito y comer junto al mar es agradable, y hasta ahí puedo leer. Si no te apetece pagar un suplemento por cenar en el paseo te tienes que conformar con una mesa en el interior donde la música es intermitente y está un poco alta. Los camareros nada profesionales, al menos el que nos tocó a nosotros. Pedimos 2 ensaladas para compartir y nos trajeron una aceitera con un culo de aceite, pedimos más aceite y nos trajeron otro culo y por tercera vez tuvimos que pedir que por favor rellenaran la aceitera, y así mil detalles.
En cuanto a la comida, las ensaladas muy sosas (parece que hay algunos que no se han dado cuenta de que aparte de lechuga hay más cosas), las pizzas normalitas y la pasta fresca no parecía casera el relleno estaba prensado hecho un mazacote, la salsa era lo único que salvaba el plato de ravioli de marisco. No pedimos ni postre, para que gastar más dinero en aquel sitio. Y la carta de vinos pésima, escueta y pobre. Hacía mucho tiempo que no cenaba con cerveza. E l detalle final lo mejor, preguntamos si nos invitaban a chupitos y nos los trajeron con una cuenta aparte, ¡NOS LOS COBRARON!, demencial, la verdad....

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar