Decepción.

Acudí con mi pareja tras previa reserva telefónica. Al llegar al restaurante a la hora pactada, el servicio no estaba preparado, por lo que nos fuimos a tomar un refrigerio. Lo primero que me sorprendió para un restaurante con aspiraciones fueron los pequeños golpes que tenía una columna y la pared situadas enfrente de nuestra posición, lo que hacía que parte de la pintura hubiera saltado.

Nos recomendaron amablemente un menú cerrado propio de la semana gastronómica al que accedimos tras preguntar si la calidad era la misma que el resto de la carta y recibir una respuesta afirmativa.

El "servicio" del vino (con algún grado de más) se limitó única y exclusivamente a probar el vino.Las copas excesivamente pequeñas y muy,muy normalitas. No rellenaron la copa ni una sola vez, cosa que sí hicieron con la mesa de al lado. Lo mismo ocurrió con el agua (a 4 euros la botella de 75 cl.).También tuvimos que pedir que nos dieran más pan, a pesar de que acababan de reponer a la mesa colindante.Inaceptable.

El aperitivo era un salmorejo, correcto sin más.

Continuamos con un royal de alcachofas, aprobado justillo.

La merluza fue lo más destacable de la noche, en su punto y muy fresca. Le acompañaba un triturado simplón de guindillas verdes en vinagre y un "pil Pil" consistente en una mahonesa de sabor poco casero.

El secreto tenía un buen sabor, pero estaba levemente correoso porque estaba pasado de punto. El de mi pareja estaba mejor.

El postre era una cama de yogur con frutos rojos y violetas acompañado de un helado de menta(a mi me supo a albahaca) la finura del helado, lo único salvable. Anodino.

Pedimos una infusión servida con un azucarillo de sobre y gran parte de las hojas estaban flotando literalmente sobre el agua, por lo que nos vimos obligados a pedir que nos la filtraran. Acompañaron a la infusión unos petit fours consistentes en dos exquisitas trufas, dos diminutos piquitos de chocolate y finalmente en el centro un "salpicón" de almendras y cacahuetes garrapiñados.Echamos de menos la explicación de los platos.Al llegar a casa comprobamos que los postres podían ir acompañados de una cerveza de edición especial creada para la semana gastronómica,no fue el caso. En una hora y veinte minutos estábamos fuera.

Salimos un tanto desencantados, quizás las expectativas eran demasiado elevadas, esperaba un nivel similar al Lillas Pastia (excelente restaurante del mismo cocinero).Son los pequeños detalles los que marcan la diferencia y probablemente no tuvieron su día, quiero pensar que no tuvo nada que ver nuestra edad.

  1. #1

    Francescf

    ¿Edad?

  2. #2

    Javisa1402

    en respuesta a Francescf
    Ver mensaje de Francescf

    27 y 24 años respectivamente.Y aun me he guardado algún detalle en el tintero...

  3. #3

    Francescf

    en respuesta a Javisa1402
    Ver mensaje de Javisa1402

    ¡Menos mal! Ya pensaba que eras un quinceañero... :-D

    Me extraña lo de la edad... Llevo con mi mujer desde los 18 años y nunca nos hemos sentido discriminados por nuestra edad en ningún restaurante. Alguna vez por la de nuestros hijos, pero muy, muy pocas.

    Sinceramente, recuerdo este restaurante como uno de los que más me gustan de Zaragoza, aunque lo visité por última vez ya hace varios años. Parece que ha habido cambios desde entonces...

  4. #4

    Javisa1402

    en respuesta a Francescf
    Ver mensaje de Francescf

    Bueno...quizás fue un mal día. Pero lo que me sabe mal es que dichos servicios si que los recibió la mesa que teníamos al lado. Ademas esperaba una comida de autor o al menos algo más elaborada y a las fotos me remito para ver el resultado final. Si en una ciudad de 700.000 habitantes esto es de lo mejor que se puede ofrecer...

    Salu2!

  5. #5

    Nacho_G.F.

    Pues la verdad es que el aspecto de las fotos tira para atrás,...sólo estuve en este restaurante en la etapa anterior, cuando era Gurrea, pero el año pasado estuvo un amigo y salió muy contento. La verdad es que comprendo tu decepción. También influyen mucho las expectativas con las que acudes, si son muy altas pues a veces quedas desencantado.

  6. #6

    Pablo Iñigo

    Hola
    Soy de Zaragoza y he ido bastantes veces (3-4, una con Bilbis y el resto comidas-cenas de trabajo). La primera vez que fui, hace años, el camarero quito el corcho de la botella y lo encesto, materialmente a distancia en la papelera. Un escalofrio recorrio nuestro cuerpo, pense que me iba a despertar y que habia sido una pesadilla
    Hace varios años un Delegado de un laboratorio nos invito a 8 personas. Al acabar pidio la cuenta, y el camarero, ni corto ni perezoso, dijo en voz alta, pues.. 8 personas a 30 euros que habiamos quedado...pues 240 euros. El del laboratorio quiso morir en aquel momento
    La ultima vez que fui, fue lamentable, no quise ni meterlo en verema. Pedi 4 vinos de la carta y no tenian ninguno, acabe mosqueado diciendole que me dijese lo que tenia. Cuando acabamos, uno de los comensales pidio un coñac (que esta en todos los sitios, y ese restaurante esta al lado del Corte Ingles) y le sacaron la botella con unos... no se por decir algo 5-10 mL del coñac, le dijeron, es lo unico que nos queda tiene bastante?. Pedimos unos quesos de postre para no esperar mientras sacaban los que habiamos pedido y nos dijeron que no tenian y asi te puedo contar... mil no... pero 5-6 mas asi, si.
    O sea, que tengas la edad que tengas, amigo, tiens razón, hay que exigirles más a los que se creen que dan un nivel que ni de lejos son capaces de mantener para cualquier cliente que entra siempre que tienen la puerta abierta

  7. #7

    lair75

    Lo único que se me ocurre es que los de la mesa de al lado fuesen a la carta, no es excusa, pero a algunos le puede servir para justificarse. La única qvez qeu he estado siendo ya La Granada estuvo francamente bien, lo acababa de coger Carmelo, y creo que por entonces estaba personalmente al mando, algo que intuyo ya no es así.

  8. #8

    Javisa1402

    La verdad es que si, solo hay que mirar las fotos(y esas son las 2 mejores que consegui hacer).Pero detalles como que te atiendan 3 camareros diferentes durante el servicio, que te digan que pan quieres (entre 2 que nos ofrecierón) y ni siquira te expliquen de que tipo son... y errores de bulto como servir por delante del comensal y por la derecha.Y suma y sigue.

    Salu2!

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar