Viernes noche, y toca cena con amigos, suelo engañarles para ciertos saraos que me interesan, y claro ellos se dejan encantados.

Me entero de que en el hotel Lopez de Haro hay unas jornadas de atún y cerdo ibérico de la mano de Ricardo Sanz y que de los tres días, cada uno cocinara con otro cocinero, al final elijó el que cocina con Kepa Txapartegui del restaurante Alameda, que ya conozco y que en su día me gusto.

Hay tres apartados y en cada uno de ellos un plato de cada cocinero.

Empezamos por el atún.

De Kabuki, un tataki de atún Echebastar, es la empresa de Bermeo que lleva desde 1967 dedicándose a la pesca de atunes, lo acompañan huevas de Mujol y almendra frita, pelin amargo, creo que por las huevas, en este primer asalto, para mi gano el siguiente envite, el del Alameda.

Atun escabechado también de la misma empresa, vamos que todo el atún era de la misma empresa, para no repetirnos mas, verduras encurtidas y refrescante de pepino y manzana, me gusto mucho mas, mas refrescante, mas sabroso.

Segundo round, atún y cerdo ibérico.

Aquí gano por KO, Kabuki, atún macerado con huevo frito de corral, papa canaria y papada ibérica Carrasco, todo el cerdo es de esta importante empresa de Guijuelo , ahumada , el atún ligeramente picante , con el huevo , las papas y la papada , ganador por KO de la noche .

Por parte del Alameda, taco de atún asado con ensalada de cabeza de cerdo en texturas, para mí el atún demasiado hecho, cuestión de gustos.

Ultimo round de salados, Cerdo Ibérico.

Aquí empate técnico, aunque el del Alameda ganaría a los puntos, si se tuviese que apurar el combate.

Kabuki, carillera de cerdo ibérico con salsa teriyaki, buena elaboración, ya se sabe, esa salsa es potente, bien.

Alameda, Butakaku de cerdo ibérico, remolacha y pomelo, buenos acompañantes para contrarrestar lo graso de la panceta fresca, si se sigue la receta japonesa, se hacen dos cocciones, la primera se hace con agua, leche y jengibre y la segunda con azúcar, soja, sake (vino de arroz) y caldo dashi, en este caso no se como lo harían pero estaba muy rico y ya he dicho la remolacha y el pomelo, ensamblaje perfecto a la grasa.

Postre, aquí solo Kabuki enseño sus cartas, muy fresco y rico, cremosos de chocolate blanco Valrhona sobre gelatina de vainilla de tahiti y yuzu, que toque mas fresco, citrico y a la vez cremosos le de el yuzu a los postres.

Y un ultimo, digamos postre, hecho por la persona que marido todo el menú con cócteles, irlandés especial “baque y suntory”, el café infusionado en frió, tela como se lo curraron.

Para acompañar el menú, cócteles hechos con whisky japonés.

El primero Pureza by Yamazaki, aguacate, agua de coco, miel, yuzu & whisky Y Yamazaki, me gustó mucho, bueno todos iban de PM.

Bosques by hakushu, guisantes, jerez y el whisky, miento los guisantes los cambiaron, no me acuerdo porque otra cosa, creo que boletus.

Joya by Hibiki, humeshu, corteza de naranja y el whisky, este costo al principio, pero con la comida entraba también muy bien.

De propina un chupito del Hibiki 12, que debe ser muy exclusivo, yo no entiendo de este destilado.

Pedimos a parte una botella de blanco de Enate, la carta del restaurante Club nautico, pelin pobre de referencias, el entorno, clásico, ro-cocó , el servicio profesional y atento , lo único , como es lógico , no les preguntes por los platos , porque hay poca idea , siempre pasa con estos saraos .

Conclusión , mucho mejor que mi anterior experiencia en el Aizian con la cocina japonesa , claro que aquella era la autentica , así que poco que decir , 100€ , todo incluido , dada la calida del producto , la cantidad y el maridaje , bien , muy majete Ricardo Sanz , parece mas serio .