La crisis nos va a dejar sin un restaurante donde ir a comer bien en Valencia. Viendo lo de hoy, además, con merecimiento. Hacía mucho tiempo que no iba al Cabanyal. Y tardaré mucho más en volver. Recordaba un servicio bastante "seco". Es lo único que ha mejorado, porque la verdad es que el trato ha sido muy amable. Pero intentar mantener el nombre del sitio sólo por el "cañazo" en la cuenta es una mala política. Hay que dar de comer. Y en el Cabanyal hemos comido muy "regular". Entrantes: anchoas caseras (saladísimas) con tomate valenciano (muy verde), calamar de plancha (buena presencia, pero con sabor a quemado) y unos segundos compuesto por dorada del día (aceptable) y bacalao (que no levantó pasiones). Inexistente carta de vinos. Vinos valencianos sólo tenían "El Capricho" (ninguno más). Pedimos luego un Rioja (había tres para elegir). Cafés sin postre. 60 euros por "barba".
Palo???
Anchoas caseras: 15.-€
Calamar de plancha??: (de potera o a la plancha?): 20.-€
Dorada del día: 22.-€
Bacalao: 20.-€
El Capricho: 17.-€
Rioja: 20.-€
Cafés: 6.-€
Otra cosa es que no lo valga, pero los precios son los que hay por estos mundos de Dios.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.