Después de más de un año volví a cenar en Cal Joan. Algunas cosas han

Después de más de un año volví a cenar en Cal Joan. Algunas cosas han cambiado desde mi primera visita a este restaurante, hace casi 8 años. Afortunadamente la comida sigue siendo más que aceptable, sin embargo el servicio no siempre está al nivel deseado, sobre todo si tenemos en cuenta que el precio ha ido aumentado de manera considerable, especialmente a lo largo de los dos últimos años. Lo cierto es que Cal Joan era un restaurante con una excelente relación calidad/precio, lo que permitía obviar algunas carencias. Desafortunadamente este aliciente ya no existe. Por tora parte, la carta de vinos es reducida y poco variada. El servicio tiende a ser rutinario y no especialmente agradable, sobre todo si reservas un día de semana y cometes el craso error de llegar 20 minutos tarde. En este caso, incluso pueden reñirte por el retraso....