Es un local excelentemente situado en pleno Barrio del Carmen, tradicional pero moderno, con tapas de todo tipo: esto es lo que le puede retratar, un local de tapeo pero de más nivel que los clásicos.
Tampoco para paladares exquisitos, pero sí de más calidad que en ocasiones se paga de forma excesiva. Tuve la última vez la mala suerte de que me colocaran con mi pareja pegando a una mesa de unos doce comensales (de trabajo supongo) con ganas de fiesta, y con mucho ruido, mucho... y espacio reducido. En otra ocasión ambiente fallero... local a tope y servicio fatal, espera delante de la mesa sin ser atendidos, es loq ue tienen las Fallas supongo. Pero en ocasiones normales, tapearás bien, en un sitio pequeño y lleno y que es caro, eso sí en el mismo Centro del Carmen!