Coqueto y minimalista restaurante enclavado en una privilegiada zona de la

Coqueto y minimalista restaurante enclavado en una privilegiada zona de la ciudad. Estupendas entradas (el pulpo con patatas en su punto y de exquisito sabor; cantidad justa de aceite en todos los platos sin provocar encharcamiento alguno;...) y diferencia de acierto en los platos principales (un arroz al horno demasiado duro y unos fideos con paté deliciosos). Correcta la carta de vinos. Rapidez en el servivio. variados postres, destacando la trata de chocolate y el mousse de chocolate blanco. Tienen menú de mediodía de un plato único y fijo. Dispone de terraza a la Alameda si el buen tiempo lo acompaña. Volveré para seguir investigando en la carta. Y la próxima vez incluiré los nombres exactos de los patos. Perdón.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar