No me gustó nada este restaurante, una vez abierta la carta no nos resultaba apetecible nada, platos sin criterio ni sabor, vajilla desconchada, servicio normalito.

Es un local con unas vistas fenomenales y una comida bastante buena y bien elaborada, pero eso sí teneía que ir sin hambre ya que la cantidad de comida es realmente ridicula, en mi caso en concreto salí del restaurante y casi entro en otro que había en frente. por lo demás está bien la amabilidad es perfecta y la atención adecuada. eso si es bastante pijo, pero claro tiene que serlo.

Nos ha parecido un restaurante muy recomendable: en un entorno sobre la playa de riazor, ofrece unas vistas muy buenas de la playa y de la ciudad.
Cocina basada en buena materia prima con detalles de autor. Pedimos para compartir las zamburiñas elaboradas con una salsa de tomate, y el foie de centollo y erizo: ambos platos muy buenos. De segundo dos pescados, en bacalao sobre garbanzos y espinacas y la merluza sobre compota de tomate, bastante bien los dos. De postre pedimos una degustación de postres para compartir muy rica.
La carta de vinos es amplia, con referencias de todas las denominaciones nacionales. Tomamos una botella y media de Pazo de Señoras, servido perfectamente.
El servicio, aspecto que debería incluirse en las valoraciones, fue muy bueno duante toda la comida.
Un restaurante muy recomendable.

Restaurante ubicado en la ultima planta del museo, destaca fundamentalmente por sus excelentes vistas al mar. La cocina está supervisada por los responsables de Casa Pardo, único restaurante de la ciudad con estrella michelín. No obstante, la labor se queda en eso, puesto que no hubo nada que nos llamase la atención. Pescados de calidad y preparaciones simplemente correctas. Carta de vinos amplias y buen servicio del mismo. Precio aproximado sin vino: 30 €. Recomendable para una cena romántica.