Gran restaurante, sin grandísimas pretensiones pero realmente sales

Gran restaurante, sin grandísimas pretensiones pero realmente sales contento de haber cenado bien y haber pagado un precio correctísimo. Ubicado en una zona de Argentona en la que todo son casas, la tranquilidad es máxima, cuando entras al retaurante pasas por un jardin pequeño pero muy bien cuidado, una vez dentro del local, la atención es muy correcta sintiendote como en casa. La carta se compone de 1 menú degustación que es de 12 platos divididos en 4 (3 opciones por plato). Todo estaba muy bien elaborado, traen medias raciones peroo más que sufientes, el menú también incluye un formidable carro final donde puedes degustar de 12 a 15 postres. Lo recomiendo firmemente, nosotros volveremos muy pronto.