Dicen que hay gustos para todo el mundo. El fin de semana pasado estube

Dicen que hay gustos para todo el mundo. El fin de semana pasado estube comiendo con 2 amigos en el interior del restaurante y magínifco. Era la primera vez, y quedamos muy contentos. Pedimos un pica-pica Mariner para los tres con arroz caldoso para terminar. De postre tiramissu y crema catalana, copa y cafes. Para beber 2 botellas de vino blanco, Torres Matrau (viñas de Riesling) y una botella de Soler-Jové Crivá Cava Brut. Pagamos 190 eur. entre los 3. Perfecto. Repetiré seguro.