Decepcionante, una tomadura de pelo.Bar de tapas de dudosa calidad y con peor elaboración, eso sí, a precios de lujo.Del servivcio ni hablar, le preguntamos a la camarera si el pescado era salvaje o de piscifactoría y nos contestó que no sabía, que suponía que era un pescado normal.No acertó con el punto de ninguna de las carnes.El servicio del vino es nulo, carta corta y con los precios por las nubes.Ni siquiera dan a probar el vino y lo abren agitando la botella como si estuviese preparando un cóctel.Nunca jamás volveremos.

Desde su reforma no habia vuelto, un aire un poco mas "moderno" pero sin pasarse, es el introducido y es normal, nos encontramos en una "excelente casa de comidas" de las pocas que quedan, que apuestan por la clasica cocina y la honestidad en su calidad y servicio.
Yo suelo tomar siempre que me lo ofrecen su arroz caldoso, me recuerda los sabores de casa,excelente sus buñuelos de bacalao, el resto siempre esta en su punto, tanto de calidad, sabor, como cantidad.Los vinos estan muy bien conservados, lastima que nadie se alli sepa venderlos ni servirlos,el encopado te lo haces tu mismo,eso si, en la cristaleria adecuada, algo tosca tal vez.Me parece, insisto, un restaurante muy tipico y familiar, en el que todavia su mentora se dedica a pararse un rato con el cliente, pero de corazon, no por que toca.La RPC es mas que atractiva, aun tomando postres, entre ellos su riquisima milhojas.Muy recomendable.

Buen lugar donde disfrutar de elaboraciones sencillas, con muy buena materia prima. el trato en sala muy agradable, aunque se pueden mejorar detalles del vino y temperaturas me resulta buen sitio para una cena informal

Cocina de cuchara y buen tratamiento de las materias primas. Pilar la dueña, encantadora, correcta, sin fraude

Nueva visita, y en este caso, cierta decepción. No tanto en la comida, ya que fue correcta, sino en el servicio, mejorable, y sobre todo en los precios. Me sorprendió negativamente la factura, sobre todo cuando nos decantamos por los arroces del día, en detrimento de pescados o carnes. Cuando se cobra de esa forma, se exige más atenciones y más calidad, además de lo antes mencionado, un mejor servicio.
Una lástima, porque nos lo pensaremos muy mucho a la hora de volver.

Uno de pocos sitios que en agosto estaba abierto. Muy tranquilo. El servicio correcto, y el pescado muy freco y en su punto de plancha. Estoy de acuerdo en que podían mejorar en vinos y su servicio. Otro dato que ciertamente chirría: el apertivo que te sirven al sentarte es... patatas fritas chips! Como en un cumpleaños infantil, vamos.

Otra nueva visita me confirma la buena selección de producto en carnes y pescados. en comidas de grupo habría que mejorar la atención del vino, como el servicio y las copas, por ejemplo. Son detalles que se agradecen al final de la comida. A excepción de este punto, bien.

Situado en la zons de Cánovas, correctos entrantes (buena materia prima) y buenos pescados y carnes. Servicio del vino mejorable, aunque las copas y mantelería son correctas. Disponen de dos platos de cuchara diarios, que van cambiando, así como de algunos arroces y otros platos exclusivamente por encargo.