Restaurante Blanc en Girona
Restaurante Blanc
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:

Añadir tipo de cocina

Añadir vino por copa

Precio desde:
25,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
26 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
5.3
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
4.2
Comida COMIDA
6.2
Precio medio entorno ENTORNO
5.0
RCP CALIDAD-PRECIO
7.5
Opiniones de Blanc
OPINIONES
5

Ayer cenamos en este céntrico restaurante. Destaca su decoración blanca y ambiente agradable.
No me gustó que las mesas fueran tan pequeñas, tipo bar, donde apenas caben los platos, copas y si pides aceite y sal ya es un juego de equilibrio que quepa todo. Para ganar espacio, compartes el platillo del pan con tu acompañante. Además, las mesas están demasiado próximas unas de otras, con lo que oyes las conversas de al lado.

La comida bien, aunque sin tirar cohetes. Comí una buena ensalada con croquetas de queso y una dorada bien hecha, pero tampoco espectacular. Los postres me fallaron. El tiramisú estaba demasiado frío, tanto que perdía gusto. Fallan mucho en la carta de vinos, cortísima, y en las copas. El servicio muy correcto y amable, rápidos y sin atosigar. Muy bien en RCP.

Cocina correcta con raciones generosas y un trato agradable por parte del personal. Las mesas, un poco pequeñas e inestables con “caminos de mesa” que dificilmente permanecían en su lugar. Deben mejorar la carta de vinos, su servicio y sus copas. Abundante plato de spaghettis a la boloñesa que hizo las delicias de mi hijo de 4 años. Parrillada de verduras (recién hecha), jamón con pan con tomate, salmón a la plancha con salsa de mostaza, coulant de chocolate (muy bueno), chardonnay de Olvena. Precio 70 €.

Cocina correcta, trabajada, local blanco (su nombre lo indica). Demasiadas mesas. Trato correcto, desenfadado. Unos de mis preferidos en Girona cuando la cartera no da para mas.

Restaurante muy céntrico, con ambiente "lounge" y mesas excesivamente juntas. Carta original y asequible. Vinos bastante ausentes, para ser un poco diplomático. Es una alternativa discreta para tener en cuenta entre semana. Mejor por la noche (por la luz y el ambiente). Se encuentra delante de un bar emblemático en Girona, el Nummulit. Por cierto, aunque te pongas exigente, no te van a cambiar las copas de vino. Es lo que hay. Ambiente muy juvenil y desenfadado.

Restaurante anexo al Hotel Ciutat de Girona. Del grupo de "La polpa", "Menjador", y muchos otros restaurantes repartidos por toda la geografía catalana. Estética parecida a los antes comentados, con un intento de conjugar modernidad, diseño y clasicismo.
Comida moderna, pero sin excentricidades, buena variedad de platos (inmenso el roastbeef de bonito) y muy buen servicio (la camarera se acordó de a quién correspondía cada uno de los platos en una mesa de ocho personas, cosa poco habitual).
El servicio del vino es su peor punto. Carta cortísima, aunque con alguna referencia salvable y unas copas de risa, yo pensé que eran de adorno, pero por no dar el cante, no pedí que nos pusieran algo decente.
Precios muy bien, unos 30€ por barba, vino incluído.
En definitiva, volveremos, pero pediré que cambien las copas, caiga quien caiga.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar