La decoraciob esta bien cuidada, con unaq combinacion de amarillo y granate.
la entrada ofrece un ambiente calido, con una alfombra y un jarron con unas flores que le da un toque hogareño
la comida esta bastante bien presentada, con toques de autor en cada plato.
el servicio de vino es bastante bueno.

Local teóricamente dedicado al Esturión y al caviar

Servicio del vino correcto, con carta tambien correcta pero precios elevados y temperatura ambiente para los tintos (para el Hécula era un poco demasiado incluso en invierno). Bonita cava acristalada pero que me temo que no está climatizada (daría igual por que tenian su puerta permanentemente abierta..)

Comida bien ejecutada y con buena materia prima, clásica con toques de modernidad sobretodo en la presentación. Bastante buena.

Entorno físico muy moderno y agradable, personal poco rodado y no demasiado atento. Eramos dos mesas para dos camareros y las esperas y olvidos no se perdonan. Otros detalles graves como dos cartas con precios diferentes (¿?) acabaron de enturbiar la cena. Muy mejorable.

Menú degustación 35 euros. Nosotros cenamos con un Hécula por 65 euros dos personas.