Restaurante Portofino en Valencia
Restaurante Portofino
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:

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Precio desde:
22,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
martes.
Nota de cata PRECIO MEDIO:
36 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
3.4
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
2.1
Comida COMIDA
3.0
Precio medio entorno ENTORNO
4.7
RCP CALIDAD-PRECIO
3.0
Opiniones de Portofino
OPINIONES
7

Ayer noche celebrábamos el primer aniversario de un tema importante. Fuimos a la Stregga, que a nosotros nos trae muy buenos recuerdos y es donde hace un año celebramos el acontecimiento pero estaba cerrada (fallo de no llamar). Como en la zona hay varios italianos nos dimos una vuelta y, al ver el portofino, decidimos entrar.

El restaurante estaba vacío, claro que eso hoy en día y salvo excepciones no significa nada. Voy al grano que me enrrollo.

Nos atendió una señorita a la que pedimos el rueda que tenían en carta "Casa de la Vega". Desconozco su precio en el mercado pero 13 euros me pareció una relación calidad-precio de robo. La señorita estuvo mirando en la nevera botella por botella hasta que encontró una en la que ponía rueda (literalmente). Todos tenemos primeros días, que no sé si es el caso, pero antes si se está de cara al público, hay cosas que es necesario llevar preparadas.

De Entrantes Patés y Quesos (10,90). De verdad os digo que nos pusieron cuatro pedacitos minúúúúsculos de pate de pimienta y de otro paté que prefiero no recordar. Que si no me equivoco son los mismos (lo digo por el ribete externo) que venden en mercadona. Los quesos eran una insunuación de ración, finitos, finitos. Todo ello en un plato enorme como si fuéramos más tontos de lo que parecemos. Cuando vi el plato estuve a punto de decirle que se lo llevara pero era un día de celebración y en esos días todo es bueno. Para colmo nos cobraron dos euros por el servicio de pan (cuatro rebanadas de pan corriente y un paquete de rosquilletitas), sobre ésto decir que también a otros restaurantes que cobren lo que quieran por el plato de patés y quesos, pero que incluyan en el precio un pan en condiciones, que cobrarlo aparte, salvo que sea un pan casero o importado de La Habana... no sé, no me parece de recibo. Se sobreentiende que el paté se come con pan.

Para comer una pizza borromea (9,50) y unos tallarines al pesto (9,80). La base de la pizza... bien, el resto de los ingredientes... para flipar, pocos y muy corrientes, mucho, el jamón york era pequeños cuadraditos de sucedáneo de jamón york, el queso no sabía a nada y 4 champiñones eran de bote. Si a todo esto le añadimos un kilo de tomate, ya la tenemos. Los tallarines, como pasta y punto de cocción bien, normalitos, pero el pesto tampoco sabía a nada y tenía una acidez demasiado intensa y el queso ni se olía (y eso que a mí me encanta el pesto).

De postres nada, ya la habíamos ****** lo suficente, un café (1,30) y una infusión (1,60). En este punto nada que comentar.

Eso sí, me manché y la camarera se ofreció con un producto quitamanchas. Es un detalle que debe ser sustitutivo del viejo chupito.

Para que veáis que no es fue sólo en nuestra mesa, a la de al lado que se pidieron un tinto se lo metieron en una cubitera con su hielo y su agua. Con esto no puedo y los precios no puedo calificar bien el vino.

No vuelvo ni gratis.

Fui a cenar con mi chico en san valentín y acabamos allí porque no encontramos mesa en otro sitio. Al entrar nos dijeron que esperásemos 5 minutos...(y media hora más) después de los 35 minutos de plantón nos dicen que pasemos, nos colocan en una mesa preparada para 3 comensales, de repente se levanta una pareja de otra mesa y nos dicen que por favor nos cambiemos a la de dos...La mesa en cuestión estaba situada en un rincón, entre una pared y un lateral de una cámara de vinos, y allí nos dejan un buen rato en la mesa, con un mantel mojado y nada más, les decimos al cabo de un buen rato que si nos cambian la mesa, y sí, nos cambian a una mesa, pero sin cambiar el mantel y allí nos dejan un buen rato, sin platos, ni copas, ni cenicero, ni na.. a la media hora conseguimos que nos tomen nota...pedimos una ensalada de pollo y dos pizzas...al rato viene el camarero y nos dice que no hay masa!! en un italiano!! no hay masa!! bueno pues...escalopines para mi y lasaña de verduras para mi chico..al rato.. nos dicen que..no hay escalopines!! bueno, pues una lasaña de carne...a los 2 minutos nos dicen que no hay lasaña de verduras...bueno, pues dos de carne... Por lo visto tampoco debían tener carne porque cuando nos plantan las lasañas nos damos cuenta de que no llevan carne picada...llevan jamón york!! la peor lasaña (si es que se le puede llamar así) que he probado en mi vida. Lo mejor de todo es que después del ataque de risa que nos entró porque íbamos a cenar lo que ellos querían...oimos a la pareja de la mesa de atrás que les dicen que no hay pan...por favor...cómo se pueden quedar sin pan!! pero ahí no acaba todo...a la chica de atrás le sacan el postre (creps de chocolate)y oimos que el camarero le dice...la nata...te la debo...porque no nos queda...
En fin...que nunca volveré a este restaurante italiano que se queda sin masa para pizza, sin escalopines, sin verduras para la lasaña, sin pan, sin nata, y en la que hacen la lasaña a base de capas 3 capas de pasta y dos de jamón york...
El precio?? pues para lo que comimos...4 hojas de lechuga y cuatro granos de maiz, dos lasañas de jamón york malísimas y una botella de lambrusco normalita 43 euros...

Totalmente de acuerdo con los comentarios anteriores. Entramos a cenar porque nos falló la primera opción que teníamos por la zona y era sábado ya pasadas las 22’00. Pizza con poco fundamento (sólo sabía a tomate) y pasta insípida.
En cuanto al vino, sin comentarios...muy muy flojo, pero también es verdad que no creo que sea un sitio a valorar en este aspecto. Precios no adecuados a la calidad ofrecida.

La base de las pizzas está pasable,el resto es pura imaginación.

La verdad es que es uno de esos locales que no suelo incluir en esta sección. Totalmente de acuerdo con Pepe. Considero que se trata de una pizzería que no hace mal las cosas, lejos de las grandes franquicias que se extienden por todas partes. Pero tampoco presenta nada que se pueda destacar.
Obviamente hablar del servicio del vino de este lugar me parece tedioso, aunque se puede resumir en una palabra: Lambrusco.
Ahí está, sin pena ni gloria.

Bueno la verdad es que no se le pueden pedir peras al olmo amigo ballester. Portofino es una pizzería batallera de las de entrar a dar un bocado y salir rápido. Sin más.
Las pizzas no están mal, al menos hacen la masa ellos mismos pero de ahí no pasa. No se os ocurra probar la pasta... Y para beber pues eso el lambrusco y a correr, ¿qué le vamos a hacer si estos italianos nos venden estos vinos que ni ellos mismos consumen?

Clásico restaurante pizzeria de la zona de Cánovas. Realmente es de los que menos me gustan. En un par de años he ido tres o cuatro veces, y siempre me ha decepcionado. Tal vez sea la pasta, que cuando la he pedido nunca me ha gustado, o los postres (una vez me sacaron un tiramisú casi congelado). También pude que sea cuestión de gustos, pero creo que en esa zona hay mejores opciones. Carta de vinos aceptable. Viernes y sábados se masifica (cenas de clase, etc...).

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