Un restaurante japo sin pretensiones pero bastante auténtico. Local de tamaño medio con espacios reducidos entre mesas y con muchos clientes de fenotipo asiático (¿japonés?) y que recuerda a esos locales auténticos de barrio de cualquier de oriente. Por supuesto todo el personal cumple esos criterios y especialmente con la amabilidad y educación y ganas de agradar que tienen el personal de estos locales orientales que, por contraste con los occidentales, parecen casi estar en el servilismo.

Una decoración algo festiva y juvenil; manteles individuales, copas y cubertería sin alardes; destacada variedad de vajilla y emplatados básicos.

La carta impresa y plastificada para facilitar el entendimiento con los clientes incluye los diferentes platos que preparan pero también las bebidas, cafés y licores. Existe una posibilidad de combinar platos (llamados menús combos) si quieres probar varios platos o bien vas en grupo, con una sustancial rebaja en el coste final aunque quizás las raciones sean algo menores; lo desconozco pero lo pedido fuera de carta no difirió mucho en raciones.

Para beber un par de aguas de medio litro, un par de tintos de verano con muy buena presentación y preparados in situ más una copa de vino: Celeste tinto Roble 2021.

La sucesión de platos al centro que conllevaron el pedir dos combos nº 5 y luego añadir el combo nº 4, más el wakame, fueron:

. fideos yakisoba x 2: mejor de lo esperado, buena cocción y correctos de sabor. 

. nigiri de salmón: arroz correcto y calidad cumplidora.

. wakame x 2: muy bien aliñado y buena calidad. 

. maki de salmón: 8 unidades que cumplen sin más.

. témpura maki de salmón: algo diferente pero tampoco es que sea para tirar cohetes.

. rollo de pato: mejor sabor que aspecto, hubiera repetido (2 unidades).

. rollito de la casa x 2: crujiente por fuera, nada aceitoso. Bien logrado y también repetiría en otra ocasión (2 unidades).

. pollo con soja y sésamo: buena ración a compartir, bien frito y sabor correcto.

. sasimi de salmón: correcto de calidad (5 unidades).

. ternera con salsa yakiniku: bien condimentada y ajustada de sabor.

. langostinos panko: buen tamaño, buena fritura y correcto sabor (3 unidades).

. témpura California: buena témpura, casi sutil. Curioso.

. berenjenas agripicantes: buen producto, bien rebozadas y picante al gusto para añadir con el wasabi. 

Em general es lo esperable y destacar los rollitos y el wakame. El servicio muy por encima de la media.

La sobremesa comportó un par de buenos cafés, un cortado y un té verde. Todo lleno con mucha gente joven; algunas mesas duplicaron servicio y hubo ratos con gente esperando y se descartaron clientes por falta de reserva previa. Está en la cresta de la ola de adolescentes y estudiantes y sobre todo de personas del lejano oriente; nos gustó a los cuatro comensales y en especial a la joven que lo eligió.