Restaurante del hotel burbuja

En uno de los hoteles más singulares en que puedes alojarte en España, se ubica este restaurante que solo da cenas puesto que el desayuno se hace en las habitaciones y no hay servicio de comidas porque la gente, en su mayoría, suele estar solo una noche.

El restaurante no es para ir adrede pero es, con mucho, la mejor (y casi única) opción de cena en varios kilómetros a la redonda. Además el hotel hay que disfrutarlo en muchos momentos pero especialmente en el atardecer. Así que cenar allí es una agradable obligación.

El servicio de muy amable y efectivo, rapidez de cocina para un comedor longitudinal en L con la barra a la entrada desde la recepción (hay otra entrada desde el jardín, cerca de la piscina). Bien decorado suelo de imitación a hidráulicos antiguos y con pequeñas tarjetas de clientes que han disfrutado del lugar, luces tenues y ambiente de parejas (máximo 7 parejas porque solo hay 7 habitaciones burbuja), muy romántico.

La carta de vinos y otras bebidas es muy corta en vinos con solo 3 blancos, 4 tintos y 2 espumosos, de corte clásico y con solo un espumoso y tinto de nivel y a precios más bajo de lo esperado. No es su guerra. El servicio básico de descorche, cata y primer llenado de copas. Nos decidimos por un desconocido y local vino blanco Route 33, coupage de macabeo (0%) y chardonnay (30%) que me pareció una excelente opción calidad/precio más allá de la sostenibilidad de hasta el alcornocal con que se hace el corcho. Completó un agua de la cercana Benasal de medio litro

La carta de comidas tampoco es muy amplia, con 9 entrantes y 6 principales más 4 postres. El tipo de cocina es clásica de producto actualizada, con bonitos emplatados sin dejar de lado alguna arriesgada composición. Vajilla simple. El servicio es casi personalizado.

Tomamos:

. aperitivo de la casa: un queso curado de la zona con algunas pasas y unas gotas de aceite por encima. Un buen pan acompañó durante la cena.

. huevo explosivo: premio a la mejor tapa de España (no se el año) que consiste en 4 mini rollitos de primavera de pasta filo, con huevo a baja temperatura en su interior y que hay que intentar comer de un bocado porque de lo contrario tu vecino de enfrente lo compartirá contigo. Muy original y resultón. Recomendable.

. crema de calabaza, naranja y jengibre: mezcla de elementos en apariencia poco casables pero consigue un gran plato; muy poca presencia de picante para agradar a la mayoría. Muy bien.

. corvina con salsa donostiarra:  buen lomo de pescado y buena salsa. Bien.

. postre: fruta fresca (kiwi) y una tarta lemmon pie: bien la tarta y la fruta, algo verde, creo que debió de servirse al menos cortada y preparada.

No tomamos cafés ni infusiones ni combinados

  • vino

    vino

  • aperitivo

    aperitivo

  • huevos

    huevos

  • crema

    crema

  • corvina

    corvina

  • postre

    postre

Recomendado por 2 usuarios
  1. #1

    Abreunvinito

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  2. #2

    Joan Thomas

    Muy curioso hotel restaurante, una experiencia diferente pero interesante.
    Saludos

  3. #3

    Abreunvinito

    en respuesta a Joan Thomas
    Ver mensaje de Joan Thomas

    Una pasada de hotel y un restaurante que acompaña.
    Saludos

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