Otro restaurante mas que se queda a medio camino, en los autodenominados de cocina de autor.
Sitio donde nunca comes mal y su cocina, sin embargo no te enamora.
Local coqueto con unas mesas demasiado pequeñas, por supuesto aprovechando el corto espacio del mismo.
Degustamos 2 comensales
* Bocartes curados 2 unidades 8€
* Talo de bonito 2 unidades 10€
* Tudanca salmuera 12€
* Tartar lubina 16€
* Maganos encebollados 19€
* Calabaza y mole 16€
* Lomo tudanca 23€
* Dos postres, 14€
Precios, aparentemente baratos, pero las raciones son contenidas al mismo tiempo, pues viendo lo degustado por dos comensales, el nivel de ingesta fue justo nada mas.
Perfecto servicio en sala con tempos correctos en el mismo, pero note que cuando me preguntaron por los primeros platos y mis comentarios, todos dentro del respeto y la educación, no agradaron, obviaron seguir preguntándome, con lo cual no encajaron, lo que era algo constructivo.
Otro restaurante mas en Santander, que agradara, por los comentarios que he leído anteriores al mío.
En mi caso busco la cocina de autor real, la que cuando pruebas un plato te crea sensaciones diferentes a otros sitios, algo que no tenga comparativa a otros platos probado con anterioridad.
Bajo mi modesto criterio eso es la cocina de autor. ESTO NO
Este no es el caso .
Solo les deseo que en la singladura que espero sea larga tengan suerte,`porque mercado tienen en Santander, para su tipo de cocina