Aunque es el plato estrella, lo que nos gustó fue que puedes comprar marisco en la pescadería de enfrente, El chico del percebe, y comértelo en este bar.
Y así lo hicimos. Compramos unas quisquillas cocidas y nos las comimos con unas cervezas en la pequeña terraza. A nuestro lado, unos portugueses se pusieron tibios a percebes.
Esta es la pescadería
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.