Ésta será mi tercera y última crítica de restaurante de mi corto pero bien aprovechado viaje a Galicia. El España es un local que, aunque por el nombre parece de corte clásico, en realidad presenta propuestas, sin ser El Bulli, bastante modernas y casi innovadoras.

Es un lugar muy amplio y cómodo, que funciona para comidas, cenas e incluso para tomar algo por la noche. El diseño del local está bastante cuidado, con colores modernos aunque quizá no muy escogidos, y sillas y mesas también seleccionadas con cierto gusto, aunque la comodidad sería mejorable. Consta de un piso superior, pero nosotros nos quedamos a comer abajo.

El menú del día está a 15 euros. Como único punto negativo, decir que faltaba un plato de primero, lo que es bastante grave teniendo en cuenta que sólo había dos opciones. Comentar que sí que es cierto que fuimos un poco tarde, pasadas las 14:30. De todas maneras, presentar un menú del día con sólo tres opciones de primero y segundo me parece un poco corto, sobretodo si al cabo de un rato se reducen a dos (y no tengo 100% claro cuando escribo estas líneas si eran 2 ó 3 opciones).

Vamos ya con la comida: de primero, un salpicón de marisco presentado en forma cilíndrica. Había gambas, creo que pimiento, no sé si bacalao (mi memoria ya me falla, habré de hacer las críticas al momento...), coronado por unos tomatitos cherry cortados. Estaba rico, buen producto, bien presentado... aunque no fue un plato que me emocionó. Yo la verdad es que soy de platos calientes y de postres fríos.

El segundo sí que fue de nota: unos raviolis de rabo de buey coronados por unas rejas diría que de parmesano. Bastante jugosos, buena la pasta... a mi la verdad que me encanta este tipo de platos, con lo que el éxito estaba asegurado.

De postre, aun subió más el listón. Una mousse de trufa servida en una copa bastante elegante. Se saboreaba hasta la última molécula, buen gusto a chocolate y textura muy acertada.

El pan (bueno) estaba incluido. Pedimos una botella de agua extra de vidrio de 3/4 (yo tomé una copa de Ribeiro por ejemplo como elección en el menú) por la que no nos cobraron mucho más de 2 euros. El precio de estas cosas (cafés, etc) es muy asequible, como en toda la ciudad.

Resumiendo... Uno de los sitios a los que hay que ir en Lugo, incluso lo pondría como 1ª o 2ª opción si sólo se va a estar un fin de semana. Bien de precio y con originales tapas (por ejemplo, minihamburguesa de wagyu). De hecho, la planta baja funciona como gastrobar de tapas (aunque comimos ahí) y el primer piso de restaurante con servicio a la carta y de menú degustación. Muy, muy recomendable.

Rte. bien situado, bien decorado, trato amable, vajilla, cristaleria, cuberteria y manteleria de primera y comida excelente.

Hemos ido a comer a este restaurante, ya que es uno de los mejores que hay en Lugo.
Tomamos el menú degustación, compuesto por un aperitivo(empanada de xouvas y espuma de calabaza), 3 entrantes (vieira con cebolla caramelizada y espuma de patata,espalda de caballa y foie con queso del cebreiro y manzana), un pescado(mero) y carne (ternera con risotto) y dos postres, ambos muy buenos y abundantes.
Una gran comida y que recomiendo a todos aquellos que vayan por Lugo.

Tradicional resturante de la ciudad recientemente restaurado. En la planta baja hay una cafetería y el restaurante está situado en el primer piso. Local agradable y bien decorado. Amplio. Cocina que no se sale de la tradición (buen solomillo de buey, buen tratamiento de los pescados), bien elaborada y sin buscar elaboraciones arriesgadas. Bodega climatizada a la vista, buenas copas y carta de vinos.