Lo primero de todo, debo decir, que fuimos con una oferta del 50% sobre los precios de carta, lo que le haría subir la relación calidad precio. Como no sé si siempre se aplica este descuento, lo dejo en correcta.
Amplio y moderno restaurante, muy bonito, con grandes ventanales y una decoración muy limpia. Situado en un barrio muy poco transitado, al menos en festivo.
Comida de mercado con guiños a la moda. Pedimos entrantes para compartir y luego un segundo (pondré los precios de carta):
– Alcachofas en flor confitadas en aceite de oliva. Ricas alcachofas. 16 euros.
– Crujientes de pollo con salsa de mostaza y miel. Un plato sencillo mil veces visto, pero está bien hecho. 12 euros.
– Taco de rabo de toro con crema agria especiada y cilantro. Guiño mexicano con algo tan nuestro como el rabo de toro. La verdad es que estaba delicioso. 16 euros (venían 3 tacos).
– Canelones de pollo de corral y foie con manzana caramelizada y salsa de setas. Otro plato sencillo pero muy sabroso. 15 euros.
Luego yo pude compartir estos dos pescados:
– Rodaballo al falso pilpil y ajetes asados y piparras. En nuestro caso sustituyeron los ajetes con puerro (que estaba muy rico). Buen punto del pescado. 24 euros.
– Merluza en tempura con verduras orientales y mayonesa cítrica. Perfecto rebozado. 20 euros.
De postre compartimos una rica:
– Torrija especial Popa con helado de leche merengada. 5 euros. Muy goloso.
Y luego otros dos buenos también pero menos originales:
– tarta de chocolate y tarta de queso. A 5 euros cada una.
La carta de vinos es, obviamente, corta pero con alguna cosita para elegir. Copas correctas y precios decentes.
Bebimos dos botellas de Gramona La Cuvée Reserva 2014 a 24 euros y una de una rica y ligera garnacha de Madrid, Parajes de los Vidrios, a 20 euros.
Un lugar al que fui sin expectativas pero que me terminó encantando (el descuento hizo bastante) pero que sin ser un lugar espectacular permite disfrutar de una comida agradable.