El gancho de las Tapas

Nos recomendaron este restorán en el hotel donde pernoctábamos, sabedores de que éramos españoles y que la oferta sobre todo es de Tapas. No salió bien, tampoco mal del todo, la opción dado la idea de tapa en Inglaterra no es la misma que en nuestro país.

El local está muy bien situado en la población, la decoración tiene un punto friki -yo creo que buscado- y mesas y menaje son muy sencillos, separación entre las mismas correcta.

Es pequeño y una sola camarera se hacía cargo de la atención, amable.

Pedimos gambas en tempura, champiñones, el trío de patatas bravas y unas ribs. Los platillos cumplieron: las patatas en 3 cuencos, uno prácticamente solas, otro con tomate y otro con curry, las costillas muy sabrosas, raciones un poco justas.

Donde naufragan es en el vino, carta cortísima, solicitamos un Zinfandel rosado, llegó una botella del 2016 que ya había vivido su momento, copas muy flojas.

No tomamos postre.

Fue el restorán que menos nos gustó de los que estuvimos en Whitby, en su descargo también decir que era el de precios más bajos (26€ per cápita), todo va en consonancia.