... o el día que lloró Siri. Oye mirad, que cada uno es como es, pero se hizo tal lío el GPS que se aturulló y casi le da un apechusque de los buenos. Que si sabes dónde está vas del tirón, pero como vayas por primera vez llévate provisiones pa'l camino porque con GPS eso es un carajal del 15.

Al lío. ¿No habéis ido? ¡¡ Id !!  ¿Ya habéis ido? ¡¡ Volved !!

Ale, sigamos las personas de bien con el asunto este de charlar un ratejo abarloados y copa en mano.
Llevaba más o menos en mente qué iba a pedir. No me preguntéis, que ya no me acuerdo. Total, que me cuentan que tienen menú degustación y que el palo va de contarte los biotopos, los productores, las lonjas, la almazara... y oye mira, que yo soy chico fácil y si me tocan la guitarra yo me arranco. Que para el vino hay más de lo mismo, pues ale al lío.

Que además, excepto un ratejo que hubo una pareja, tuve tooodo el servicio de cocina y sala para mi. Que puesto a pensar parece normal. Que allí no llegas como no te tire en marcha un ovni o algo...

Rocas, arenas, esteros, bancales... toda la mar gaditana.

No es plan relataros todo el asunto, pero si alguna cosilla que habla mucho y bien de ellos. Soy alérgico a la ostra. En lugar de sustituirlo por cualquier otro plato me comentaron que dado lo que había llegado de la mar salada y esta circunstancia habían pensado recomponer el menú con otros platos y cambiar el orden si yo no tenía inconveniente. Je, inconvenientes yo a la hora de comer, ¡esperarsen que me remango!

Los platos que no fueron sobresalientes, lo rozaban y la mayoría estaban por encima. Pero ojo, no iba la cosa de preparaciones extrañas, si no de productos y productores. No en vano, y respecto a estos últimos, hay fotografías de ellos en el lugar.

Recuerdo platos... Espectacular gambón. Sin palabras con los tres pases del carabinero. Algo para recordar mucho tiempo. Sin palabras. Recuerdo ahora... creo que era cigala, pero en un jugo de coñetas que era un espectáculo absoluto. Para mojar pan; y lo mojé. Cómo sería que no recuerdo qué bicho había en el plato, pero tengo grabada la imagen y el sabor de ese caldo de coñetas.
La ortiguilla con ¿cucurro? ¿cuscurro? ¿currusco? No recuerdo el nombre. Era algo similar a un búsano o berberecho king-size. Uno de los platos más deliciosos que recuerdo haber comido.
Mero. De profundidad. Mero de profundidad. Una vez probado este creo que yo no había comido mero en mi p?ta vida. Carne nívea y turgente que se transforma en gelatina cuando llega a la piel crujiente. Excelente-excelente-excelente-excelente.

Vinos escogidos con criterio. De allí. Y pensando en que el plato y el vino van juntos de la mano. Igual que con los platos, también con el vino te cuentan todo lo posible de ellos.

El servicio amable, cercano, te cuentan todo lo posible y más; atentos y anticipándose. Y que aguantarme a mi no es fácil leche...
Que yo soy como soy y ya a estas alturas no me ando con muchos miramientos. Hay platos en los que yo paso de cubiertos y voy con la mano (y me chupo los dedos) y claro, eso puede hacer que les deje las servilletas para tirar. Antes de que ocurra aparecen con toallitas "fashion" para que no la líe.

Pan riquérrimo. Muy destacable. De Paco "el panadero" de Arcos. Pan del que comí repetidas veces y no es habitual que lo haga en restaurantes. Muy buen pan.
Pan que mojé en un riquísimo aceite de oliva. Tan bueno que hablé con ellos para saber más de él y a la mañana siguiente me planté en la almazara. Pero eso es otra historia y debe ser contada en otra ocasión.

Sinceramente creo que es una de las comidas que más he disfrutado. Aquello está donde Cristo dió las tres voces, pero volvería mañana mismo.

El asunto del comercio va de 85 EUR y el bebercio 45 EUR. Reviso el ticket, pues lo tengo delante al escribir esto, y el té verde final fue invitación.